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20 de May de 2015

Gran triunfo de la toma de Abasto. Se aprobó la Ley de expropiación de los terrenos en la Legislatura Bonaerense y un acta acuerdo para la cesión de las tierras, la urbanización y plan de viviendas. Agradecemos a María Álvarez la publicación de sus fotos.

Abasto.Un camino para millones

Se logró la expropiación de tierras en La Plata

Al cierre de la edición anterior, se mantenía el acampe de las familias desalojadas de Abasto y se preparaba para una gran movilización el 13 de mayo a la Legislatura Bonaerense por la Ley de Expropiación. El sábado se había realizado una amplia reunión multisectorial y el domingo un masivo festival que convocó a más de 2.000 vecinos. El acampe se encontraba sobre la Av. 520 entre 211 y 212, a 50 metros de la Comisaría, a una cuadra de los terrenos desalojados, cortando uno de los accesos principales de La Plata, de entrada de mercaderías y pasajeros. Entre asambleas multitudinarias, y reuniones de la mesa del cuerpo de delegados se fue armando la marcha.
 
Movilización por la expropiación
El miércoles 13 arrancó en el acampe la concentración de los vecinos para movilizarse al centro de La Plata. Entre una veintena de micros, sumando camiones y autos, más de 1.300 personas se dirigían al centro de La Plata para la concentración. Ya en 7 y 32 se fue armando la marcha que convocó más de 5 mil, y donde se expresó una amplia unidad multisectorial de cerca de 100 organizaciones sociales, gremiales, campesinas, estudiantiles, de derechos humanos y políticas. Fueron muy importantes las columnas de la CTA-ATE y de la CCC, con delegaciones del conurbano de La Matanza y Zona Sur, y Asoma. También estuvieron presentes los legisladores Juan Cocino (GEN) y Gustavo Di Marzio (Fpv-Mov. Evita), la FULP y centros de estudiantes, y partidos políticos como Frente Popular, PTP, PCR, JCR, UP, PO, PTS, MST, PG.
Con las consignas de “Expropiación ya, de las tierras de Abasto; Restitución a sus legítimos poseedores” y pancartas diciendo “Tierra para vivir y trabajar”, en un clima de alegría, entusiasmo y esperanza, se caminaron las 30 cuadras hasta llegar a la Legislatura. Cantos por las tierras y la expropiación, por la unidad de Abasto y contra Mattioli, el mafioso inmobiliario que pretendía robarse esas tierras con el aval de la  Justicia, se escucharon todo ese día. Se volanteó una carta para que todos supieran del reclamo y la verdadera historia de las tierras y el desalojo. Para destacar fue la gran participación de jóvenes y mujeres, para muchos su primera movilización, y fue muy imponente la autodefensa que se desplegó.
 
La expropiación es ley
A partir de las 15 hs., comenzó a sesionar la Cámara de Senadores, con la presencia de vecinos de la toma en el recinto, donde se aprobó por unanimidad. Luego, pasó a la Cámara de Diputados, donde se ratificó el proyecto y se transformó en Ley la expropiación, con un plan de viviendas y urbanización. El principal fundamento de la Ley es el destino de tierras ociosas para un fin social.
Este es un hecho sin precedentes en la historia legislativa bonaerense por varias cosas. Es la primera vez que se aprueba una ley con la sesión simultánea de las cámaras y por un tema que favorece a los intereses del pueblo, y por unanimidad. Es la primera vez que se expropian tierras sin la existencia previa de un barrio.
Afuera, la expectativa reinaba en cada uno de los presentes. Ante cada movimiento se levantaba la mirada y se armaban asambleas improvisadas para saber cómo venía todo. Hasta que llegó la tan ansiada noticia: se aprobó.
Es inexplicable las sensaciones que se vivieron, entre risas, abrazos, gritos, vivas y lágrimas en los ojos, cada uno fue expresando lo que sentía por dentro. Se expropiaban las tierras que una semana antes se las habían despojado con represión, y se conseguía algo tan esperado, “un pedacito de tierra para vivir”.
Con ese clima se realizó un acto, escuchado y aplaudido por todos, donde hablaron algunos de los protagonistas principales de la toma. El Vasco Berdasagar abrió y cerró el acto, y Diego, delegado de la toma; el juez Luis Arias; el senador Emilio López Muntaner (FPV) y diputados Juan Cocino (GEN), Gustavo Di Marzio (FPV-Mov. Evita) y Cristian Castillo (FIT); y de dirigentes de las organizaciones presentes: Oscar De Isasi (ATE-CTA), César Baliña (ATE-CTA), Héctor Gómez (Suteba La Plata-CTA), Ezequiel Antognini (delegado ARS-ATE), Fredy Mariño (CCC), Gumersindo Gómez (Originarios en Lucha y FNC), Alvina Vides (Asoma), Lautaro de Pequeños Productores y PG, el presidente de la FULP, y Cristina Juárez, de Liberpueblo y abogada de la toma.
Más emocionante e impresionante fue llegar a Abasto. Una multitud se juntó en el acampe, muchos que se habían quedado bancando, los que venían de La Plata, y otros que se acercaron cuando se enteraron de la gran noticia. Para arrancar los festejos se marchó por las calles para que todos conocieran el gran triunfo que se había conseguido, recogiendo muchos saludos y aplausos de vecinos.
 
Garantizar lo conquistado
Con el triunfo de la Ley de Expropiación, ahora la lucha continuaba para lograr la entrega del predio y el retiro de la policía. El jueves 14 se realizó una asamblea con más de 1.000 personas que expresó la firme decisión de volver a entrar a los terrenos desalojados exigiendo el retiro de la policía, ratificándolo con el voto. Cabe aclarar que todavía se encuentra la policía en el predio y alrededores.
En medio de la asamblea, llamó el juez Arias comprometiéndose a librar una orden para que se retirara la custodia policial en 24 horas. Lo cual fue tomado como un tiempo de espera. Mientras tanto se mantenía el acampe, se convocaba a una nueva asamblea el día siguiente a las 12 hs. y si se mantenía la decisión de entrar al predio costara lo que costara.
Desde esa noche comenzaron negociaciones con distintos sectores y niveles del gobierno, y se queda en reunión con el conjunto de los delegados. Al mismo tiempo desde el medio más importante de La Plata, se pide desalojo de la avenida cortada y mayor presencia policial.
El viernes una asamblea de 1.400 compañeros decide que se acepte la reunión de negociación y una nueva asamblea para analizar lo propuesto.
La reunión se realizó en el salón de los Escudos del Senado y estuvieron presentes el senador López Muntaner, el diputado Di Marzio, secretario de Nación Pascolini, secretario de provincia Bitar, secretario municipal Sete, el juez Arias, concejales, y los 35 delegados por manzana de la toma. Luego de 5 horas se llegó a un acta acuerdo de 11 puntos que fue firmado por todos los funcionarios, y se llevó a la asamblea para su aprobación.
Los principales puntos: 1. Gestiones para que se promulgue la ley de expropiación inmediatamente; 2. Realizar un censo teniendo como base al elaborado por el “cuerpo de delegados de la asamblea de legítimos poseedores”; 3. Conformar una mesa de gestión en el marco del artículo 36 de la Ley 14.449 (Acceso justo al hábitat) con los 35 delegados por manzana, que funcionara una vez por semana, con poder de decisión; 4. Ejecución de la urbanización a través de los organismos que integran el estado nacional, provincial y municipal, con gestión para la construcción de viviendas; 5. Pedir a la Justicia el sobreseimiento de los detenidos en el desalojo; 6. Permitir a los delegados a transitar y supervisar el predio afectado con el fin de custodiar el mismo; garantía de que nadie ingrese, e instalar un tráiler en el predio donde funcionará la mesa de gestión, el cuerpo de delegados y la asamblea cuando entre en vigencia la Ley y 7. Permitir a la asamblea instalar una carpa en la entrada al predio; a cambio de que se levantará el acampe.
Una asamblea de más 1.000 vecinos aceptó el acuerdo. Al día siguiente, se levantó el acampe y se instaló a la entrada del predio expropiado en la Av. 520 y 214, una carpa por cada manzana, más las que sirven para el funcionamiento del cuerpo de delegados y cocina. De esta manera se disponen a custodiar el predio hasta que culmine el trámite de expropiación que puede durar entre 45 a 60 días.
Este compromiso tiene una gran importancia ya que permite avanzar en la recuperación de las tierras, que sean reconocidas las familias desalojadas como legítimos poseedores y proyecta la urbanización y el plan de viviendas necesario para la concreción del barrio tan anhelado.