En el documento leído en el acto y firmado por numerosas organizaciones denunciaron que “la manipulación estadística ha pretendido ocultar el alcance de fenómenos como la pobreza y la indigencia y el efecto corrosivo de la inflación sobre los salarios que hoy es fundamental ante la apertura de las paritarias”.
En el documento leído en el acto y firmado por numerosas organizaciones denunciaron que “la manipulación estadística ha pretendido ocultar el alcance de fenómenos como la pobreza y la indigencia y el efecto corrosivo de la inflación sobre los salarios que hoy es fundamental ante la apertura de las paritarias”.
Agregaron que“la resistencia de los trabajadores del INDEC organizados en ATE ha sido desde el primer momento de la intervención del organismo, un constante llamado de alerta sobre los efectos de la mentira estadística para el resto de los trabajadores y los sectores populares”.
Además plantearon que “ahora hay un cuestionamiento a las estadísticas del INDEC por parte del FMI, después de seis años de manipulación, lo cual es parte de una negociación política con el gobierno nacional que poco tiene que ver con las necesidades de los trabajadores y la población de contar con estadísticas confiables. Ha sido el gobierno nacional a través del INDEC quien pidió asesoramiento al FMI, en el 2008 y en el 2011, actualmente en función del cálculo del IPC (índice de precios al consumidor) nacional que existía y que fue desmantelado como programa incluyendo el despido de los técnicos que allí se desempeñaban.”
Un integrante de la Junta Interna del INDEC se refirió brevemente a lo vivido en estos seis años de lucha. Señaló que a pesar de los atropellos de la patota, los despidos, y la intervención del gobierno, que cambió las condiciones de trabajo, no lograron atemorizar a los trabajadores.
Por su parte, el delegado de ATE INDEC, Marcelo Rosenberg afirmó que el gobierno con la suba del 20% del impuesto a las ganancias “no cambia nada” porque con el techo a las paritarias de un 20% van a ser más los trabajadores a los que “les van a meter la mano en el bolsillo”. Se refirió también a que “esta intervención nos quiere hacer creer que la inflación del año pasado fue de un 10, 8 cuando fue del 25% y este año se proyecta en ese sentido. Es inadmisible por eso seguimos nuestra lucha”.