Sería imposible comprender la multitudinaria concentración de más de 10.000 personas –15.000 para los organizadores– de Armstrong sin analizar la situación de la industria metalmecánica del lugar.
El polo industrial de esa localidad está ubicado en la intersección de Ruta 9 y Ruta 15. Una de las empresas más importantes como Crucianelli (120 obreros) que fabricaba en serie tres máquinas por día, está virtualmente paralizada. Lo mismo sucede con De Grande (70 obreros), Monumental (30), El Torito (50), Cele (40), Gimetal (80), Erca (60), Baima (40), Metar (30), Acepla (30) o Eise (30). Idéntica suerte corren las fundiciones INFA (90 empleados), El Inca (35), Wadi (15) o San Martín (10).
Luego de una recorrida por estas fábricas y fundiciones, pudimos comprobar la angustiante realidad que viven los trabajadores. Sólo se realizan tareas de mantenimiento y se construyen maquinarias por pedido. Los sueldos que oscilaban entre 3.300 y 3.600 pesos, debido a la falta de horas extras hoy se ubican entre 1.800 y 2.200 pesos. Si bien todavía no se observan despidos masivos, nadie sabe a ciencia cierta qué va a suceder a fin de mes. A la vez la situación de los operarios que han sacado créditos –se debitan automáticamente por recibo– es más complicada aún, ya que lo que perciben no les alcanza ni para la alimentación. El que estaba construyendo o refaccionando su vivienda, debió abandonar ese sueño.
Sólo a partir de estos datos se podrá comprender cómo estos obreros, sin el apoyo de la UOM, desde hace casi un mes realizan cortes en la intersección de Ruta 9 y Ruta 15 demostrando una combatividad, unidad y claridad conceptual que sorprende a propios y extraños. En el acto, Pablo Maldonado, un delegado de base, resumió el pensamiento del sector afirmando: “No teníamos otro recurso que subir a la ruta”. Posteriormente, y expresando un compromiso total con la Multisectorial, aseguró que “estamos muy contentos porque aquí están los industriales, están los chacareros, los comerciantes, los obreros, las familias” para terminar lamentando que sólo hay una excepción “nuestro gremio no está”.
El combativo acto
Desde las primeras horas de la tarde comenzaron a llegar a Armstrong delegaciones de FAA, AFA y metalúrgicos autoconvocados de Casilda, Arteaga, Fuentes, Los Molinos y otras localidades. Estas fueron recibidas con aplausos por los obreros metalúrgicos que estaban en el corte. Fue particularmente emotivo el recibimiento de la columna de la CCC de Rosario y La Matanza y de Pueblos Originarios en Lucha.
El escenario estaba ubicado a la izquierda del corte y tenía un gran cartel de fondo que rezaba “Armstrong de pie”. A un costado del mismo se podía observar una cosechadora Vasalli y un viejo tractor Johnn Deere con un cartel que decía “Vendo el 35%, hablar con Cristina”. Del otro lado, una gran pancarta sintetizaba el pensamiento de la Multisectorial “Campo + Industria = Producción y Progreso”. Frente al escenario se dispusieron decenas de sillas para los intendentes y jefes comunales presentes.
A las 18, desde el palco se informó que según fuentes policiales ya había más de 10.000 personas. A partir de ese momento los bombos resonaron con más fuerza y el acto comenzó a ganar en emotividad y combatividad. Mientras invitaba al público a saludar a las organizaciones presentes, el locutor le dio la bienvenida, entre otros, al intendente Fernando Fischer, a la diputada del ARI Susana García, al presidente de FAA Eduardo Buzzi y al “mítico dirigente agropecuario, el Vasco Paillole”. La presencia de Juan Carlos Alderete y la CCC fue saludada por la multitud con una ovación.
En el palco sobresalían un grupo de trabajadores metalúrgicos encabezados por Rubén Cicarelli y Pablo Maldonado. También estaban presentes los dirigentes de FAA Buzzi, Paillole, Peretti, Orsolini, Barchetta; Ana Galmarini del MML; Juan Carlos Alderete de la CCC; Jorge Nuñez de la FTV disidente y el intendente Fischer, entre otros
Luego de que Milagros, en nombre de los chicos de Armstrong, leyera una emotiva “carta” a la presidenta donde le reclamaba que resuelva el conflicto con el agro, comenzó formalmente el acto. Primero se entonó el Himno Nacional y luego el cura párroco, Hugo Pereyra, bendijo el encuentro y reivindicó la Carta del Episcopado que “critica la pobreza” e “invita al diálogo y al esfuerzo”. A su turno, el intendente Fischer felicitó a los metalúrgicos autoconvocados para destacar que “reforzando este movimiento hoy están los hombres de campo”. Por último, y luego de criticar la forma de coparticipar las retenciones, le recomendó al gobernador y los intendentes que “rechacen la dádiva que esclaviza”. “No vamos a hacer una obra pública sobre las ruinas de nuestras industrias” aseguró.
En nombre de los productores agropecuarios hablaron Fernando Pirani de FAA de Armstrong, Gerardo Colotti por los productores autoconvocados, Omar Principe por FAA, Roberto Cerruti de Coninagro y Néstor Roulet de CRA, quienes además de criticar al gobierno reivindicaron los cortes de los metalúrgicos autoconvocados. A esa altura el locutor informó que la concurrencia ascendía a 15.000 personas, lo que desató el delirio de los presentes, quienes comenzaron a repudiar la presencia provocativa de un avión que ensayaba una suerte de ataque contra la multitud.
Rubén Cicarelli y Pablo Maldonado hablaron en nombre de los metalúrgicos autoconvocados. Juan Carlos Alderete (ver recuadro) lo hizo en nombre de la CCC y cerró la lista Eduardo Buzzi.
El dirigente federado reivindicó la organización del acto felicitando a los organizadores y particularmente al responsable del distrito, el Vasco Paillole. Luego respondió a las declaraciones de la presidenta quien dijo que “los ruralistas nunca pararon cuando estaba la dictadura” asegurando que no recordaba “donde estaba Cristina cuando en el 81 y el 82 bregábamos por volver a la democracia”. “Haciendo guita” le respondieron desde la multitud.
En el tema retenciones dejó en claro cual es la propuesta de los pequeños y medianos productores que fue aceptada por el resto de las entidades gremiales. Manifestó que “Hemos podido salir de ese concepto económico que dice retenciones cero, para decir que las retenciones deben ser un instrumento que transitoriamente defina a quiénes hay que fortalecer, por eso queremos eliminación de retenciones para los productores más chicos, disminución de retenciones para los medianos y que paguen retenciones los 2.000 tipos que manejan el 60 por ciento de los granos de la República Argentina”. Por último, recordando algunos tramos del Martín Fierro, reivindicó la unidad de los distintos sectores. El acto culminó con un emotivo ¡Argentina! ¡Argentina! y ¡El pueblo unido, jamás será vencido!
Una situación
social explosiva
Como ya se ha señalado, en Santa Fe la situación social es explosiva. Prácticamente todos los sectores de la producción han sido afectados por la crisis económica. Hay miles de despidos y suspensiones en la industria metalmecánica, y también en la construcción, transporte de carga, carne, automotriz, acero, alimentación y electrodomésticos. El gobierno, temiendo el desborde social, logró adelantar las elecciones mientras continúa con las provocaciones contra los pequeños y medianos productores, tratando de sembrar el caos. Fomenta la quema de campos, el robo de maquinarias agrícolas, las apretadas a dirigentes y hasta “misteriosamente” aparece un avión que sobrevuela a baja altura, intimidando a los presentes en el acto de Armstrong
Ante esta preocupante situación se observa una manifiesta inacción de la dirigencia gremial oficialista, y serias vacilaciones de una buena parte de la “izquierda”. Esta parece más preocupada en cuestionar las alianzas de Buzzi y FAA, que en ponerse a la cabeza de la lucha y denunciar a Moyano, Caló y los traidores de la CGT. Sin dudas, ambos sectores terminan favoreciendo las políticas reaccionarias del kirchnerismo.
En cambio por abajo no se vacila y se están multiplicando los reclamos. Primero los actos de Arteaga y Cruz Alta, luego el de Fuentes y finalmente la multitudinaria concentración de Armstrong. Estas manifestaciones de protesta fueron organizadas por multisectoriales y contaron con una fuerte presencia de trabajadores y productores agropecuarios, que estuvieron acompañados por el comercio, la industria y los intendentes y jefes comunales de distintos lugares. Asimismo, y ante la pérdida de puestos de trabajo, los obreros se organizan y salen a la lucha. Así sucedió en Metalúrgica Stanford de Rosario o en Nestlé –la actual DPA– de Firmat, donde frente a los primeros 18 despidos, los empleados junto a sus familias respondieron cortando la Ruta 33.
Pero también aparecen respuestas espontáneas, como sucedió la semana pasada en Esperanza, la primera colonia agrícola santafesina. Allí, una mujer “autoconvocada” relacionada con el MML, que fabrica y vende muebles, convocó a una reunión para discutir sobre la crisis. Ésta derivó en una movilización popular de más de 4.000 personas, de la que participaron pobladores de Frank, Humboldt y otras localidades.
La decisión de la gente de salir a luchar, la irrupción en las rutas de los “metalúrgicos autoconvocados” y la combatividad de los “chacareros autoconvocados” y las bases de FAA, que impusieron en la Mesa de Enlace su programa de segmentación y coparticipación de las retenciones, facilitaron la conformación de las multisectoriales. Estas se van transformando en la vanguardia de la lucha contra las políticas K. Hay una escalada contestataria y un nuevo escenario. Es por esto que La Nación, Clarín y los grandes medios, no ven con buenos ojos la salida que se va vislumbrando y tratan de opacar actos multitudinarios como el de Armstrong. Pretenden que la puja se dirima el 28 de junio, entre el kirchnerismo y la oposición parlamentaria que responde a otros sectores de las clases dominantes.
