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30 de May de 2012

El jueves 23, la CCC junto a varias organizaciones marcharon al Tribunal Superior de la Ciudad para exigir el desprocesamiento de Luciano “Tano” Nardulli y Diosnel Perez por la causa Indoamericano.

Basta de perseguir a Nardulli y Perez

Hoy 1421 / Los represores del Indoamericano están libres

El jueves 23, la CCC, la Agrupación Darío Santillán, el FOL, agrupación Kike Lescano, Polo Obrero, MST, entre otros, se movilizaron al Tribunal Superior para que se frene el juicio contra Luciano Nardulli (coordinador de la CCC de Soldati), y Diosnel Pérez (FP Darío Santillán), acusados de ocupación por la jueza de la Ciudad Iñiguez, en los hechos del parque Indoamericano.

El jueves 23, la CCC, la Agrupación Darío Santillán, el FOL, agrupación Kike Lescano, Polo Obrero, MST, entre otros, se movilizaron al Tribunal Superior para que se frene el juicio contra Luciano Nardulli (coordinador de la CCC de Soldati), y Diosnel Pérez (FP Darío Santillán), acusados de ocupación por la jueza de la Ciudad Iñiguez, en los hechos del parque Indoamericano.
La semana pasada, los abogados defensores de Nardulli y Pérez presentaron una nota en el Tribunal Superior de la ciudad de Buenos Aires pidiendo la nulidad del juicio. Acompañando esta pelea realizaron una conferencia de prensa en la Legislatura porteña, donde fueron acompañados por nueve diputados de la Ciudad. Previamente, estos legisladores ya habían pedido a la jueza Iñiguez una reunión para discutir el tema.
Gracias a la gran solidaridad, una delegación de compañeros fue recibida en el Tribunal Superior. Allí Nardulli denunció que existe “un problema de persecución porque el Indoamericano puso al desnudo el problema de la vivienda de millones de familias en la Argentina. Y los que tuvimos una actitud solidaria con el reclamo somos perseguidos y nos quieran encarcelar, mientras que los que mataron al marido de la compañera (señalando la foto de Emilio Canaviri que llevaba su viuda) están libres”. Después habló Diosnel Pérez que explicó que “si nos quieren procesar a nosotros, cometen una injusticia muy grande, porque lo único que hicimos fue estar al frente de la lucha, fuimos citados a la Casa de Gobierno para ver cómo podíamos resolver la situación y ahora en lugar de arreglar las cosas, nos quieren meter presos”.
En la reunión una de las integrantes del Tribunal planteó que “acá está el problema es social, nosotros no podemos hacer nada pero está el tema penal que nosotros tenemos que votar”, y que “analizarán el caso”.
Cuatro asesinados y
los policías sobreseídos
Hace tres semanas, las organizaciones denunciaban el sobreseimiento de los policías implicados en los asesinatos durante la ocupación del Indoamericano. Luciano Nardulli, consultado por este semanario, nos contaba que todas las organizaciones sociales, en particular las que están en la zona de Villa Soldati, plantearon “que había que hacer algo por nosotros, por nuestra situación frente a la Justicia” y que los asesinatos no pueden quedar impunes.
En los comienzos de la causa, la jueza Nazar, dijo que el caso por el que se los quiere juzgar a Nardulli y Pérez no era un delito porque se trataba de un problema social, y que la causa se tenía que archivar. Los fiscales de Mauricio Macri apelaron este fallo, y la Cámara de Apelaciones dio lugar a ese pedido; cuando vuelve a la jueza Nazar, la magistrada reiteró que el caso era un problema social, pero en lugar de archivar la causa, se excusó y se la pasó a la jueza Iñiguez.
Según Nardulli, la segunda jueza “se tomó cuatro meses para ver cómo resolvía el tema porque eran seis implicados”. Y dijo que existe “un acuerdo entre el kirchnerismo y el macrismo para abordar el tema”. De los seis, dos quedaron fuera de la causa por “falta de méritos”, dos aceptaron la “probation”. “Y los únicos que quedamos en esto somos Diosnel y yo. Porque nosotros no aceptamos la ‘probation’ porque no cometimos ningún delito, el delito es del Estado que hace abandono de persona”.
Nardulli recordó que el juez Otero ordenó el sobreseimiento –sin siquiera indagarlos- a los policías implicados en los asesinatos de los compañeros del Indoamericano, y que la crisis de la vivienda se agravó: “Antes veías personas durmiendo en las veredas, ahora son familias enteras”.