El 1° de febrero el gobierno nacional relanzó la inscripción a la beca Progresar, a la cual acceden 235 mil estudiantes universitarios de todo el país. ¿Cuál es el contexto en que se reabren estas becas nacionales? El gobierno quiere implementar varias reformas en nuestro país (previsional, laboral, educativa, etc.). El 14 de diciembre tuvo que suspender una sesión del Congreso nacional porque en las calles, los gremios, sindicatos y estudiantes estaban afuera del Congreso pidiendo que no se apruebe la Reforma Previsional. A los pocos días el gobierno la aprobó, y pospuso, para calmar los auges de luchas, la Reforma Laboral. Al mismo tiempo se abre un nuevo round por las paritarias nacionales, en el medio de que van a aplicar nuevos tarifazos de hasta el 2.400%, por ejemplo en el consumo de gas natural.
El macrismo, al cumplirse 100 años de la Reforma Universitaria, va a reformar el sistema educativo público. Esta Reforma la quiere hacer siguiendo las líneas de trabajo que nos plantean el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional. Buscan aprovechar las condiciones que les deja la Ley de Educación Superior y la Coneau que fueron implementadas por el menemismo y continuadas por el kirchnerismo. Van a atacar una vez más la gratuidad, la laicidad y los contenidos de los planes de estudio de las universidades públicas. El Banco Mundial en sus documentos buscan revalidar el “mérito individual” y las capacidades “innatas” de cada estudiante. Negando las profundas desigualdades históricas y sociales de las políticas ejercidas por grupos, clases y países dominantes. Buscan, en fin, la “maximización del potencial estudiantil”, porque la educación superior nos debería formar según el tipo de habilidades que requieren las empresas. Tratan de maximizar la gestión empresarial y la obtención de sus ganancias. Buscan imponer la idea de que ciertas/os estudiantes son una pérdida y que la inversión educativa se transforma en un costo grueso para un Estado que les da pérdidas. Por eso dijo Macri que todas/os tenemos que hacer un esfuerzo para achicar el gasto público, y la educación no está ajena a ese planteo.
La situación en la universidad no está aislada de esta realidad, las medidas tomadas por el macrismo han repercutido directa o indirectamente en las universidades de todo el país. Cada año sufrimos aumentos: colectivo, copia, alquiler, comedor, etc. que nos dificultan permanecer en la facu y continuar con nuestros estudios. Muchas veces esta situación nos obliga a buscar empleo para bancar la carrera. El porcentaje de deserción en las universidades argentinas a nivel de grado está alrededor del 70%.
Cuáles son estos cambios
En primer lugar, los requisitos de la beca Progresar cambiaron; a continuación te explicaremos estos cambios caso por caso. En cualquiera de los casos sólo podrán inscribirse estudiantes cuyo ingreso familiar –suma de ingresos de padre, madre o pareja conviviente- no supere 3 salarios mínimo, vital y móvil, es decir, $27.600.
- Renovantes: continúan con los requisitos anteriores y para renovar el plan deberán tener aprobadas 2 materias del año 2017. Es decir, quienes tengan aprobadas al menos 2 materias cobrarán el mínimo ($1.600). En caso de que acrediten la mitad de las materias correspondientes al año que cursaron en el 2017 cobrarán el monto completo que le corresponde. Deben inscribirse nuevamente.
- Ingresantes: deberán tener entre 18 y 24 años inclusive y ser alumnos/as regulares de la universidad. Cobrarán el 80% mensual y el resto al finalizar el año académico.
- Estudiantes no ingresantes: Deberán tener aprobadas el 50% de las materias del plan académico correspondientes al año que cursaron en el 2017 y tener hasta 30 años de edad.
En segundo lugar, los montos y discriminaciones por carrera fueron modificados. Las “carreras prioritarias” cobrarán entre $1.800 y $4.900; las “no prioritarias” entre $1.600 y $2.300; los “profesorados” entre $5.316 y $7.442. Quienes cursen carreras prioritarias y aprueben el 100% de las materias del año con promedio de 8 o más, recibirán el un “reconocimiento a la excelencia” del doble de la beca anual. Reconocimiento meritocrático a la excelencia = exclusión.
¿Qué proponemos?
Proponemos que se quiten las trabas excesivamente meritocráticas que se impusieron en las becas y exigimos una suba de las mismas. Luchamos día a día por una universidad por y para las mayorías y creemos que es el Estado el que debe garantizar el acceso y permanencia a la educación pública y gratuita como derecho que nos corresponde.
Para una universidad que sea realmente pública y gratuita es necesario políticas de bienestar universitario que respondan a las necesidades de las y los estudiantes. Desde ALDE junto a Octógono impulsamos la creación de becas de ayuda económica en la facultad, como paliativo y ayuda para las y los estudiantes. Sumate a construir una universidad que esté al servicio de las necesidades de nuestro país.