Hace diez años fusilaron al maestro Carlos Fuentealba y con él, el gobernador neuquino Sobisch intentó fusilar al pueblo y los trabajadores neuquinos que veníamos combatiendo las políticas de Menem, De la Rúa y Duhalde desde el Cutralcazo.
Hace diez años fusilaron al maestro Carlos Fuentealba y con él, el gobernador neuquino Sobisch intentó fusilar al pueblo y los trabajadores neuquinos que veníamos combatiendo las políticas de Menem, De la Rúa y Duhalde desde el Cutralcazo.
Su asesinato se dio en el marco de un plan de lucha de nuestro sindicato ATEN (Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén), pero también en el medio de miles de luchas a nivel nacional que le reclamaban a Kirchner que abriera la mano, mientras denunciábamos su doble discurso.
Quisieron callarnos, corrernos de las calles, el principal escenario de las luchas populares. Para ello los gobiernos nacional y provincial de Kirchner y Sobisch, tejieron un manto de impunidad sobre el sangriento asesinato de Carlos, y de más de veinte compañeros en Chaco, en Formosa, Tucumán, en el Indoamericano en Bariloche, muertos por la represión en la década “ganada”.
Hoy, diez años después, el gobierno de Macri pretende profundizar un ajuste feroz contra los trabajadores y el pueblo, crece la pobreza y vuelve el hambre a las barriadas.
Pero nos encuentra en franco proceso de unidad, con el espíritu de lucha fortalecido por reconocernos en cada trabajador, en cada vecino, que frente a un futuro poco alentador, decidimos enfrentar a este gobierno. Gigantescas movilizaciones en las últimas semanas demuestran que el pueblo argentino no está dispuesto a aceptar el ajuste.
A diez años del asesinato de Carlos, podemos decir que él vive en esta lucha docente, que está dando una dura batalla para romper el techo salarial y por el salario único nacional defendiendo las condiciones previsionales que a fuerza de lucha conquistamos.
La Marcha Federal docente hizo tronar Plaza de Mayo al grito de ¡Carlos Fuentealba presente, ahora y siempre!
El próximo 4 de abril (al cierre de esta edición) haremos temblar la provincia de Neuquén con un solo grito. Justicia completa por Carlos y en él, por todos los compañeros que, como Mártires López, dirigente del pueblo qom, dejaron su vida en la lucha por un futuro mejor para nuestro pueblo.