Noticias

04 de November de 2013

La hermana de Quebracho, Gladys Guerra, leyó una carta escrita por su nieta.

Carta de una sobrina nieta de Quebracho

Como para no aflojar los nudos en las gargantas y los ojos brillosos que nos dejaron Teresita y Facundo, tomó la palabra Gladys Guerra, hermana de Quebracho. Ella leyó un trabajo de su nieta, de 12 años, para su colegio en oportunidad del último 24 de marzo. La sobrina nieta de Quebracho escribió: “La historia que voy a compartir pertenece a un momento histórico muy importante con el que todos los argentinos nos sentimos identificados. Sucedió en el año 1976, cuando en la Argentina había un gobierno de facto, es decir que no teníamos la democracia como tenemos ahora. Cuenta mi abuela que un hermano de ella, que se llamaba Manuel, y le decían Manolo, tenía una personalidad que lo caracterizaba, en que quería justicia, igualdad, y de defensa de aquellos que no podían alzar su voz. Ser así en esa época significaba ser un enemigo para los militares, porque ellos creían que iba en contra del gobierno y de su ideología. Así sucedió que en ese período, como todos conocemos, hubo más de 30.000 desaparecidos, y uno de ellos fue el hermano de mi abuela. Esto causó mucho dolor en la familia. Mientras existía la esperanza de encontrarse con él, sea con vida, o sin ella. En este momento de su desaparición, él ya estaba casado, y tenía un hijo de un año llamado Facundo. Hoy él forma parte de Hijos, que es una asociación de jóvenes que buscan respuesta a ese trágico acontecimiento. La dictadura militar trajo mucho dolor en la Argentina, tanto para el ciudadano común, como para cada uno que formaba parte de los diferentes grupos militantes, arrasando con toda la sociedad, sin discriminación alguna, también los montoneros, y mediante este grupo atacando las familias de los militares. Recordar esta época nos enseña que debemos tener memoria para que nunca más nuestras familias sufran una pérdida así, y pasen por una situación de desesperanza y resignación como le pasó a la familia de mi abuela, que también es mi familia”.