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02 de May de 2012

Decenas de miles manifestaron en Santiago y otras ciudades chilenas. “No queremos ser ganado en su mercado”. Apoyo popular y propuestas de reforma educativa y estructural.

Chile: los estudiantes siguen en las calles

Hoy 1417 / Por educación pública y gratuita

Más de 50 mil estudiantes de colegios y universidades, profesores, padres, trabajadores y pueblo en general, marcharon el jueves 26 por las calles céntricas de la capital Santiago, retomando las grandes manifestaciones del año pasado en que el movimiento estudiantil chileno reclama una educación pública gratuita y de calidad. La movilización se extendió en marchas similares en otras ciudades de Chile como Concepción, Temuco, La Serena y Valparaíso -donde 10.000 estudiantes marcharon por las principales avenidas del puerto y se enfrentaron con los Carabineros-.
Así, el movimiento por una educación gratuita y de calidad está lejos de apaciguarse, como cacareaba el gobierno de Piñera.
“Chile no educa, lucra”; “No queremos ser ganado en su mercado”, proclamaban las pancartas. En remeras y banderas flameaba la imagen de Manuel Gutiérrez, el estudiante de 14 años asesaindo por un disparo de Carabineros durante una de las marchas del año pasado, hoy mártir del movimiento estudiantil.

 

Una propuesta de educación paga por otra
En Santiago la enorme columna salió de la Plaza Italia, colmó la Alameda Bernardo O’Higgins y marchó hasta el centro cultural Estación Mapocho, donde la manifestación se cerró con un acto artístico y cultural.
El miércoles por la mañana nueve alumnos de entre 15 y 17 años habían sido detenidos al cabo de una breve toma del Liceo Polivalente Arturo Alessandri Palma, en la comuna de Providencia.
La manifestación tuvo lugar apenas dos días después de que el gobierno reaccionario de Piñera presentó la propuesta del llamado Crédito con Aval del Estado: se saca a los bancos privados del sistema de crédito estudiantil y se lo sustituye por un ente público que dará créditos con un interés de 2% a pagar por los estudiantes cuando inicien su actividad laboral, en cuotas mensuales de hasta un máximo de 10% del salario. El nuevo sistema, como se ve, sigue cobrando la educación en las universidades estatales, como ocurre en las privadas; aún falta su ratificación por el Congreso.
Debido a esa propuesta el ministro de Educación Harald Beyer declaró que “la marcha no se justifica”. Pero el movimiento estudiantil calificó la oferta de “insuficiente porque sigue existiendo el lucro, sigue existiendo autoritarismo, sigue existiendo segregación”, como dijo el dirigente de la FECh Gabriel Boric. La Federación Estudiantil proclama como objetivo la defensa de la educación pública y estatal y terminar con el lucro. Tales fueron los ejes de los siete meses de protestas durante el año pasado que hundieron al presidente Piñera en su más bajo índice de “popularidad”.
Por su parte, los estudiantes secundarios exigen el fin de la municipalización de la enseñanza, y que sea el gobierno nacional quien se haga cargo de la educación.

 

Convergencia popular por la educación pública
Como el año pasado, la movilización tuvo el apoyo y la participación activa de organizaciones estudiantiles, docentes, vecinales y sociales, entre ellas el Colegio de Profesores de Chile, la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica y la Asociación de Padres y Apoderados.
Con el mismo enfoque unitario se convocó a la celebración del Día Internacional de los Trabajadores el 1º de Mayo. Los mensajes portaron llamados a la unidad y a retomar la movilización apuntando a cambios estructurales en el país.
Algunas federaciones como la Feuv (la federación estudiantil de Valparaíso) proponen rebajar el presupuesto de las fuerzas armadas, aumentar el impuesto a las ganancias del cobre y renacionalizar los recursos naturales.