Protesta por desplazamiento de campesinos para negocios privados
Seis aldeanos fueron liberados el viernes 15 en el condado de Cangwu, región autónoma de Guangxi (sur de China), después de que su detención provocó una violenta protesta el miércoles 13 con el resultado de varios agentes de policía y funcionarios locales heridos.
Protesta por desplazamiento de campesinos para negocios privados
Seis aldeanos fueron liberados el viernes 15 en el condado de Cangwu, región autónoma de Guangxi (sur de China), después de que su detención provocó una violenta protesta el miércoles 13 con el resultado de varios agentes de policía y funcionarios locales heridos.
Los campesinos habían sido detenidos el martes 12 mientras protestaban por la construcción de un proyecto de agua y habían interrumpido temporalmente los trabajos en la obra.
El miércoles 13, más de 300 pobladores se movilizaron contra la detención de los seis, enfrentándose con la policía. La multitud furiosa también volcó cinco patrulleros.
Según la versión oficial, los campesinos protestaban por la contaminación provocada por el vertido de tierra extraída de la construcción en un lugar cercano a una escuela. Pero los aldeanos negaron la versión gubernamental: en realidad protestaban porque la compensación –ya de por sí muy baja– y las casas de reemplazo prometidas tras la “compra” de sus tierras para la construcción de un lago artificial no llegaban nunca.
Matones y policía contra los obreros
En la ciudad sudoccidental de Dujiangyan, la policía dispersó el martes 12 a unas 1.000 personas que bloqueaban una ruta, tras una lucha salarial que dejó un muerto y un herido.
Unos 300 trabajadores migrantes se reunieron el martes para protestar en una salida de la autopista que conduce a Dujiangyan, a aproximadamente una hora en auto de la ciudad de Chengdu, capital de la provincia de Sichuan.
Los manifestantes llevaban coronas fúnebres y pancartas que pedían justicia para las dos víctimas. Otras 700 personas se unieron a la multitud que se enfrentó con unos mil agentes policiales.
Los dos trabajadores eran parte de un grupo de ocho que en la tarde del lunes fueron a reclamar a su empresa –la Compañía Jiaxun de Servicios Laborales– por salarios impagos. En los forcejeos fueron duramente golpeados por el personal de la empresa. Uno de ellos murió en la noche del lunes por el castigo recibido, mientras que su compañero quedó internado.
Cientos de sus compañeros de trabajo cortaron la avenida Erhuan en la ciudad de Dujiangyan. Los trabajadores furiosos enfrentaron la represión y volcaron un auto de la policía. Dos trabajadores fueron más tarde detenidos pero, ante nuevas protestas masivas a la bajada de la autopista, el jefe de la Oficina de Seguridad Pública de Chengdu debió prometer a los manifestantes que se castigaría a los criminales y se pagarían los salarios impagos. Recién entonces la multitud se dispersó.
