Las protestas tienen distintas manifestaciones, desde el quite de firmas en las publicaciones, asambleas, paros escalonados, cortes de calles y quema de gomas, como el que se llevó a cabo en Página 12 el 2/7.
Las protestas tienen distintas manifestaciones, desde el quite de firmas en las publicaciones, asambleas, paros escalonados, cortes de calles y quema de gomas, como el que se llevó a cabo en Página 12 el 2/7.
Según el sitio Infogremiales, las protestas de los trabajadores del diario oficialista van en línea con las del plenario de delegados de prensa escrita –diarios, zgencias de noticias, revistas y punto Com–, que repudió el acuerdo salarial firmado por la cúpula de la Utpba con las empresas y cámaras del sector. La objeción se basa en que los montos y plazos de cobro dispuestos “significarán una fuerte pérdida para los salarios reales”.
El objetivo de fondo es reabrir las negociaciones paritarias con la inclusión de los paritarios elegidos en las asambleas de los medios. Los trabajadores de prensa reclaman que las negociaciones se reabran a nivel actividad para evitar que se establezcan parches por empresa que provoquen diferencias entre los distintos trabajadores de acuerdo a los medios.
Los trabajadores de Página 12 denunciaron la precariedad laboral en la que se encuentran, que hasta hace poco incluía computadoras sin internet y la obligación de que cada trabajador lleve su portátil a la redacción.
Paro en el diario Crónica
El 7/7 los trabajadores del diario Crónica llevaron adelante un paro en demanda de la reubicación de los trabajadores del área Circulación, afiliados a la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (Utpba), ante el cierre del edificio de la empresa en la calle Azopardo.
La Comisión Interna denunció que la empresa – también vinculada al gobierno kirchnerista– cerró el edificio, que ya se encuentra sin luz, sin previo aviso, y exige la reubicación de los compañeros en algunas de las dos plantas de propiedad de la empresa, Pompeya o Ámbito Financiero.
