Las afectadas son más de treinta familias que, en algunos casos, hace más de 90 años que trabajan esas tierras. Aseguran que es un caso emblemático porque allí se quiere avanzar en un modelo concentrado, como se ha hecho a lo largo de las últimas décadas en todo el país.
Las afectadas son más de treinta familias que, en algunos casos, hace más de 90 años que trabajan esas tierras. Aseguran que es un caso emblemático porque allí se quiere avanzar en un modelo concentrado, como se ha hecho a lo largo de las últimas décadas en todo el país.
Bigand es una localidad del departamento Caseros, provincia de Santa Fe, ubicada en el cruce de la Ruta Nacional 178 con la Provincial 14, a 70 km de la ciudad de Rosario.
Con la agricultura como principal actividad económica, las más de 3.500 hectáreas en juego tienen su historia, y ésta comienza con Víctor Bigand, que fundó el pueblo el 15 de julio de 1909. Víctor tuvo tres hijos que no dejaron descendencia. La muerte de su última heredera, Octavia Bigand (o la señorita Bigand como se la conocía en el pueblo), en 2004, derivó en la creación de la Fundación Honorio Bigand como constaba en su testamento.
La fundación, que funciona en Buenos Aires, tenía como obligación aportar parte de las ganancias por el alquiler de las tierras a los colonos, y a las instituciones sociales del pueblo (iglesia, escuela, hospital, etc.). Los habitantes del pueblo, que hoy se han unido en la pelea por frenar los desalojos, aseguran que de las ganancias millonarias que se lleva la fundación al pueblo solo vuelven “migajas”. En diálogo con el programa La Brújula de la Mañana por Radio Wox 88.3 de Rosario, Pablo Paillole, director del distrito 6 de Federación Agraria precisó que, como primera medida, esperarán “una respuesta favorable del Poder Judicial”; de lo contrario, se llevará a cabo “una movilización frente a los juzgados de Casilda”. Además de Paillole participaron varios miembros de la entidad gremial agraria, incluido Omar Príncipe su presidente. “Tenemos el compromiso de defender esta historia y vamos a estar peleando hasta frenar los desalojos y lograr que se renueven los contratos (de aparcería) sin modificaciones, como siempre se hizo”, advirtió el presidente de la entidad en declaraciones al diario La Capital.
De la asamblea también participaron el jefe comunal, Patricio Erceg; legisladores nacionales y provinciales, como la recientemente electa diputada Mercedes Meier quien aseguró: “acá lo que está en juego es el arraigo y el futuro del pueblo de Bigand, para que las generaciones futuras puedan venir a trabajar. Nosotros defendimos siempre la agricultura con agricultores y contra la concentración. Es por eso que ponemos nuestra banca también al servicio de esta pelea”.
Todos coincidieron en que la pelea de estas familias tiene como telón de fondo la pelea por otro modelo agrario, y la función social de la tierra. “Esta lucha por los 25 colonos además debe convertirse en un ejemplo a nivel nacional del modelo agropecuario que defendemos”, explicó Príncipe.
El director del Distrito 6 de FAA, Paillole, agregó que esta lucha no es nueva sino que es la continuidad de una lucha histórica de la región y recordó que el famoso Grito de Alcorta, tuvo en Bigand, su antecedente fundamental e inmediato: “Hace 103 años, aquí en Bigand, también se juntaban los arrendatarios a hacer una asamblea para ponerle freno a los desalojos. Y esa asamblea fue lo que después terminó gestando el Grito de Alcorta”.
La Federación Agraria manifestó su respaldo al proyecto de expropiación de los campos de Bigand impulsado por la comuna para garantizar que sigan siendo trabajados por los colonos bajo el régimen de aparcería, como hace cien años y cuya iniciativa ya fue presentada en la Legislatura provincial de la mano del senador por Caseros, Eduardo Rosconi, quien participó de la asamblea al igual que el diputado nacional Omar Barchetta. Para finalizar y esperando los avances judiciales pero por sobre todo confiando en la lucha de los colonos y aparceros de Bigand, Paillole aseguró que “si hay que romper los candados, como ha pasado en algunas chacras, se hará para permitir el derecho de esa gente a trabajar”.