La lucha interna en el partido es el reflejo de las contradicciones de clase en la sociedad y entre lo nuevo y lo viejo. Es gracias a la lucha por resolver esas contradicciones que el partido avanza y puede adecuar su línea a las necesidades cambiantes de la lucha de clases. Toda diferencia implica una contradicción. Eso no quiere decir que esa contradicción sea antagónica: Para evitar que contradicciones que no lo son se transformen en antagónicas, el partido debe tener un método correcto para resolverlas, a partir de una línea política justa. El instrumento para esto es el centralismo democrático.
Mao Tsetung.