Se va terminando el 2022. Los acontecimientos de los últimos días implicaron un fuerte cimbronazo en la realidad argentina. Y también afectaron a la Región. Lo ocurrido nos golpea al paso. Pero además desnuda, con brutal nitidez, las CAUSAS de fondo de nuestras desventuras.
Por tanto, sería vano nuestro aporte si nos limitáramos a inventariar lo sucedido. Resulta imperioso poner al descubierto el hilo que vincula, uno a uno, los agravios que nos inflinge el maldito estado de las cosas.
Una semana pródiga
La asonada macrista en Diputados. El finde de los “muchachos” en el castillo de Lewis. La condena a CFK. Su vehemente réplica. El golpe en Perú. Todos estos sucesos reclaman nuestra atención.
Comparado con los 12 años solicitados por Luciani, los 6 del fallo del Tribunal resultan una pichincha. Pero los magistrados concentraron la andanada en inhabilitar de por vida a Cristina Kichner para futuros cargos electivos.
Cristina respondió. Sus dichos y su decisión, dolorosos, llevaron desconsuelo a numerosos compañeros. Por lo tanto importa destacar que su desafío de enfrentar sin fueros al enemigo expresa valentía y dignidad.
Mafias
Siendo que actúan por todos lados, ¿porqué no las habría también en las distintas corporaciones? La Justicia falló… El verbo fallar posee dos significados diametralmente opuestos. Sentenciar o pifiar. Está a las claras cual eligieron.
¿Cuántos “retiros espirituales” habrá organizado Angelici? ¿Cuántos, Rodríguez Simón? Una dosis de precaución, otro poco de suerte y si te he visto no me acuerdo. Lo que distinguió al recreo de Ercolini, D´Alessandro y Rendo fue el mix de la soberbia más la descomunal torpeza para embarrase hasta el codo. Pero, como hablamos de los poderosos, ni siquiera esto hará peligrar los fueros (de hecho, no de Derecho) de tan encumbrados señorones.
Como único descargo ellos posan de damnificados. A los pobres los espiaron.
Mafias. Que las hay, las hay. Pero a no confundirnos. Son las Mafias del Estado. Un infaltable condimento del Poder.
Gobierno ≠ Poder
Traducción: Gobierno y Poder… dos categorías muy diferentes.
En los países centrales Gobierno y Poder suelen ser la misma cosa. La escena final de una gran película (“Desde el Jardín”) nos muestra a los principales magnates yanquis llevando el cajón de un difunto. Mientras caminan hacia la sepultura van decidiendo quien será el siguiente Presidente de los EEUU. Es apenas una sátira. Pero cuánto se asemeja a la realidad.
En nuestras latitudes, ganar las elecciones, te permiten acceder al Gobierno. Que no se te confunda. Tan solo eso. Si te llamás Macri inaugurarás una temporada más de la serie “La Argentina atendida por sus propios dueños”.
Si en cambio el triunfo nos correspondiera a nosotros, los plebeyos, llegar al Gobierno es apenas el primer capítulo de un ajetreado recorrido.
Gobierno ≠ Estado. Estado « Poder
A caballo de distintas instituciones los poderosos ejercitan su dominación. Es a esos instrumentos del Poder al que llamamos Estado.
El moldeado de las instituciones consume tiempo. Muchas, muchas décadas. Ya en el siglo XIX nos lo recomendaba el Viejo Vizcacha “Hacete amigo del Juez…”. Un consejo que vale para los perejiles. Las clases dominantes ya vienen con Juez incluido.
¿Cuántos de quienes lean estas líneas habrán sido reprimidos y encarcelados por levantar causas justas? ¿Y cuántos ya no están por haber sucumbido en la pelea?
¿Cuántas luchas multitudinarias han sido ninguneadas? ¿O vilipendiadas por “ocupar el espacio público” o alguna otra atrocidad parecida? Hace años (no tantos) los golpes eran en uniforme de fajina. Ahora son de traje y corbata. ¿Los golpistas? Los mismos. Los imperios, la oligarquía, los Bancos, el Fondo. Y la legión de poleas que le son afines. O funcionales.
Usando el plural
Nuestra Argentina es un bocado apetecido por distintos imperialismos. Todos ellos coinciden en tenernos sojuzgados. En que les “debamos”. En depredar nuestras riquezas. En que no levantemos cabeza. Pero cuando se trata de determinar quién se queda con la mayor tajada, la disputa entre nuestros enemigos es encarnizada.
El Estado está loteado. Cada imperialismo (embajada + asociados locales) dispone de su propio grupo de tareas. La Fiesta de Olivos es la indecencia. Pero lo imperdonable en A. F. fue que se creyera a salvo de las filtraciones. Entre el centenar de colaboradores que día a día pululan por la Quinta, ¿cuántos harán horas extras al servicio de los distintos Servicios?
Que Jueces, fiscales, el Ministro de Seguridad de CABA, dos jefazos de Clarín se ofendan porque los espiaron… ¿Cuántas veces habrán sido ellos mismos los usufructuarios de otros hackeos? Enfurece tanto cinismo por parte de quienes sí espiaron a las familias del ARA San Juan.
Enfrentar la Agenda de los enemigos
Nuestra Agenda en una frase: LIBERARNOS, SACARNOS DE ENCIMA LAS LACRAS DE TODA DEPENDENCIA Y DEL ATRASO.
¿Ellos o Nosotros? ¡¡¡Nosotros!!! Unos pocos párrafos más y vamos delineando nuestras inexcusables TAREAS.
Soberanía política implica enfrentar la Deuda. Sacarnos de encima el Acuerdo con los Fondos. Y la intromisión del FMI. Defender nuestros Recursos Naturales y el Ambiente. Recuperar el Paraná y nuestro Mar de toda intromisión extranjera.
Independencia económica es rescatar las palancas económicas de las que hoy disfruta el enemigo. Tal como rigiera en la Argentina del IAPI restablecer el monopolio nacional sobre el Comercio exterior y sobre los depósitos bancarios. Y encarar una Reforma Agraria que le dé tierra y techo a quienes la trabajan.
La Justicia social exige terminar con el ajuste impuesto desde afuera. Combatir las desigualdades. Y obtener los fondos para ello a como dé lugar.
Lujos que si. Lujos que no
Nos podemos dar el lujo de equivocarnos. No nos podemos dar el lujo de carecer de estrategia y repetir uno y otra vez los mismos errores. Como en cualquier batalla, nuestros enemigos, que de esto saben mucho, nos castigarán. ¡Y cómo!
En el Frente de Todos ha anidado el Posibilismo. Algo así como pedir permiso para ponernos firmes. Tal como proclamaba el “inflexible” Groucho “¡¡¡estos son mis principios!!! Si no les gusta… tengo estos otros”. No compañeros. Así no funcionan las cosas.
Combate y convicción
El Pueblo y la Nación resisten la pertinaz ofensiva de los sectores dominantes por hacer aún más difícil nuestra situación. ¿Es bueno resistir? Por supuesto. Lo malo es que nos hayan puesto a la defensiva. Y que, referentes del Frente de Todos se hayan resignado a tal situación.
“Donde existe una necesidad nace un Derecho”. Pero son incontables las necesidades, y por ende los derechos, insatisfechos. Todo ello va sumando agravios. Y genera un estado de justificado desencanto respecto del accionar del Gobierno.
La decepción se vuelve desconfianza cuando nos convocan a la batalla y no se atreven a cruzar el río. ¿Qué sino ocurrió con Vicentin? Bastó un “banderazo” gorila para desandar la patriada convocada con bombos y platillos. El daño que creó ese recule aún lo estamos pagando. El grave incidente de Vicentin es un botón de muestra. Que se replica en muchos otros escenarios.
Quedarse a mitad de camino…
… y mirar para otro lado. Comparada con la negociación de la Deuda, Vicentin ha sido un vuelto. Porque la Deuda es el principal mecanismo para la Dominación de nuestros países por parte de los Poderes globales.
Aducen que no había otra que arreglar con los acreedores. Violando compromisos preelectorales (súper habitual) negociaron en secreto con Black Rock y el nuevo FMI y blanquearon las componendas entre el macrismo y el viejo FMI. Tan solo esa punta del iceberg es de por sí espantosa. Cuanto más grave será cuando se hagan visibles las “Reformas” que intentarán imponernos.
Es cierto, “no había otra”. No había otra en las condiciones de marginar al campo popular de esta batalla. Porque esa fue la decisión de quienes encarnaron las negociaciones. De vez en vez alguna queja. Pero de movilizarnos y enfrentar a los usureros en las calles ni que hablar. ¿Cómo si hubiera otra?
Siempre hay otra
Debiéramos rescatar al 2 de septiembre de este año. Un espejo en el que mirarnos. Sin que nadie nos convocara. Sin grandes medidas organizativas. En poco más de 12 horas desde el intento de asesinato de Cristina Kirchner convergimos sobre la Plaza de Mayo centenares de miles de mujeres y hombres del Pueblo. No solo cristinistas, no exclusivamente peronistas, no todos militantes. Presentes todas las vertientes que tenían que estar.
Un hecho sin dueños que es irrefutable. Ocurrió. Debemos sacarle filo y darle vuelo. Así es la potencialidad de los de abajo. No es autoengaño. Es salir del laberinto por arriba. El único antídoto válido para el escepticismo es confiar en nuestros iguales y pelearla.
Se viene el 2023
Termina un mal año. Se viene otro difícil. ¿De nuevo sopa?
Un año electoral al que sectores de nuestro Campo ya dan por perdido. Juegan al juego de una profecía autocumplida. Abandonan la pelea y habrán tenido razón. Macri (el viajero) se da el gusto de avisar todas las barbaridades que piensan cometer en los primeros 90 días de su segundo tiempo.
Aquí y allá se escuchan aparentes agudezas. “Entre guatemala y guatepeor no hay con quien quedarse”. En nuestra problemática actual, una falacia en toda la regla. ¿Cómo refutarla? Primero aclarar nuestro profunda disconformidad con el mal menor. Pero el mal mayor es lo suficientemente terrible como para concentrar fuerzas y derrotarlo. No debemos hacerle el campo orégano a Macri (en cualquiera de sus formatos).
Surge así una tarea central: frenar al macrismo. En tal dirección el rumbo político y económico del Gobierno no ayuda. La tibieza (o directamente el pecho frío) de algunos referentes los inhabilita. Por lo tanto es clave que tallemos los de abajo. Somos muchos y vamos por lo nuestro. A construir un Bloque duro alrededor de Nuestra Agenda. Y dar pelea. Porque es justa. Es necesaria. Y porque no tenemos otra.
En el Barrio
Pedro Castillo asumió la Presidencia del Perú en julio del 2021. A la derecha le demandó 16 meses sacárselo de encima. A lo largo de su Gobierno debió capear innúmeros juicios políticos. Un Congreso escandalosamente corrupto lo acuso de corrupción. Por intentar una consulta popular para facilitarle a Bolivia una salida al mar lo imputaron por traición a la Patria.
La custodia con la que se dirigía a la Embajada de Méjico en busca de asilo fue la que lo llevó a la Prefectura para su detención. Apenas una muestra de cómo funciona el Estado.
La misma OEA del golpe contra Evo ahora trabaja para legalizar la asonada contra Castillo. No todos estuvieron a la altura de las circunstancias. López Obrador, Petro y Arce han salido a exigir la libertad y restitución de Castillo en su cargo. Y el cese de la represión.
Porque el hermano pueblo peruano ha ganado las calles y no está dicha la última palabra.
Sebastián Ramírez
