Desde UTEP, como sindicato de los Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular y representante de los y las humildes de nuestra tierra, expresamos nuestro enérgico repudio a la decisión del Gobierno Provincial, Ministerio de Promoción del Empleo y la Economía Familiar, Resolución Nº 86, por la cual se dispone “la suspensión de los Programas de Empleo PPP, PIP, POR MI y PILA” por un plazo de 3 meses. Alternativamente, proponemos que el dinero sea aportado por los sectores de la economía concentrada.
Entendemos que dicha resolución debe retrotraerse por las siguientes razones:
a) Durante 4 años hemos puesto al HAMBRE, la tierra, el techo y el TRABAJO en el centro de nuestra lucha, logrando que sea parte central de la discusión política a nivel nacional y provincial; y es justo en este momento, donde la crisis es más extendida y profunda, agravada también por el COVID-19 y el dengue, cuando las organizaciones y los trabajadores y trabajadoras en ellas nucleadas, más necesidad tenemos de ALIMENTOS y TRABAJO, y la presencia del Estado como resguardo, lo que claramente no se logra con esta clase de resoluciones.
b) Entendemos que esta decisión, y los argumentos que de la misma se esgrimen en el Boletín Oficial, son contrarios al derecho, desconocen y contrarían el DNU 329/2020 del gobierno nacional que expresamente prohíbe las “suspensiones por fuerza mayor o falta o disminución de trabajo”, justamente las razones esgrimidas por el Gobierno Provincial en su resolución.
c) Porque observamos que la gestión provincial se “ahorraría” con esta medida de suspensión durante 3 meses de todos los programas, un monto equivalente a $225 millones, ajustando y dejando desamparadas a más de 27 mil cordobeses y cordobesas, muchas mujeres y hombres humildes de esta provincia. Entendemos que ese mismo monto puede obtenerse, por ejemplo, de una contribución única, equivalente al 0,2% sobre el valor de las 8 explotaciones agropecuarias más grandes de la provincia.
d) Para nosotres, cuidarnos entre todos y todas es fomentar la salud del conjunto, en sus facetas física, psíquica y social, toda ellas menoscabadas con esta resolución.
Por todas estas razones, por la paz social y el bienestar general, además de la más obvia y elemental Justicia Social que construimos y por la que luchamos diariamente, es que rechazamos esta medida.
Si bien no dejar desamparados a los más empobrecidos es necesario, los movimientos sociales insistimos en que no es suficiente. Desde la realidad de cada una de las labores que nos nucleamos y organizamos en la UTEP, venimos construyendo un futuro que supere de una vez por todas los “planes de empleo” que funcionan como parche y no como expresión de un proyecto de reconocimiento, impulso y desarrollo de los importantes trabajos que llevamos adelante las trabajadores textiles; rurales, la producción de alimento y cuidado de la tierra; las tareas de cuidados, comedores, merenderos, guarderías, espacios para los adultos mayores, espacios de no-violencia, y casas para recuperación de adicciones problemáticas; trabajadores del ambiente, carreros y recicladores; vendedores ambulantes, artesanos; naranjitas; las cooperativas de liberados. Nosotros y nosotras vamos a seguir impulsando y construyendo nuestra agenda de Tierra, Techo y Trabajo para todos los trabajadores y trabajadoras que habitan este suelo.
Seguimos insistiendo en la necesidad de alimentos para los comedores y familias que necesitan y en la entrega de elementos de higiene a los barrios en modo constante, al menos, mientras dure la crisis sanitaria. Exigimos que se deje sin efecto la Resolución Nº 86 y se amplíe su cobertura.
UTEP. (Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular)
Tierra, Techo, Trabajo
