Sin teoría revolucionaria, no hay acción revolucionaria. Esta sentencia se atribuye a Lenin, y revela la importancia de la visión estratégica, en el curso de una práctica revolucionaria.
Con anterioridad, nuestros revolucionarios de mayo, en sus condiciones particulares de existencia, también le habían dado mucha importancia a las teorías más avanzadas de su época.
Sin teoría revolucionaria, no hay acción revolucionaria. Esta sentencia se atribuye a Lenin, y revela la importancia de la visión estratégica, en el curso de una práctica revolucionaria.
Con anterioridad, nuestros revolucionarios de mayo, en sus condiciones particulares de existencia, también le habían dado mucha importancia a las teorías más avanzadas de su época.
El oscurantismo ideológico que la metrópoli imponía en las colonias, pudo ser sorteado por Mariano Moreno, por sus lazos familiares con un obispo. Así pudo leer y traducir el Contrato Social de Rousseau, libro que ejerció gran influencia en la Revolución Francesa de 1789. Este libro fue editado en Buenos Aires, durante el periodo junio-diciembre de 1810.
La revolución ponía así, al alcance de los cuadros políticos, elementos de teoría, que antes sólo estaban reservados para aquellos autorizados a leerlos por la iglesia.
Pero en la edición porteña de 1810, el Contrato Social se edita sin el capítulo de la religión civil o religión natural, que el libro original contiene. Capítulo que se omitió para no provocar una reacción de la iglesia católica, cuidando al mismo tiempo la alianza con un importante núcleo de sacerdotes patriotas que acompañaron la revolución.
Una aproximación más intensa al periodo junio-diciembre de 1810, periodo con notoria influencia jacobina en nuestra revolución, nos permite encontrar el dato de esta edición en castellano del Contrato Social, dato de suma importancia, si tenemos en cuenta que la ilustración francesa del siglo 17 fue parte de la lucha contra las instituciones políticas feudales, contra la religión y la teología imperantes y en definitiva contra la metafísica.
Evidenciaba un momento de la burguesía revolucionaria en Francia, que desde el instante mismo de su triunfo, comienza a mutar en conservadora, reflejándose esta realidad política en la posterior restauración de la filosófica especulativa en Europa a mediados del siglo 18.
Los jacobinos de mayo fueron derrotados, pero queremos resaltar lo multifacético de su batalla política, que incluyó aspectos militares, económicos, conducción política, relaciones internacionales, y también un frente en el plano teórico, con la edición de este libro.
El Contrato Social se presenta como una doctrina, orgánicamente vinculada con lo nuevo de la ciencia y las necesidades de la vida social, aparece como concepto teórico comunitario de sociedad, y es la base filosófica de un gobierno que emane de la sociedad misma, sin que sea instituido por Dios o por el papado.
Estos esfuerzos teóricos de Moreno y su grupo no alcanzaron para imprimir un rumbo revolucionario prolongado a nuestra gesta de mayo, fueron derrotados por la correlación de fuerzas del momento histórico, y también por las limitaciones de clase que tuvieron los líderes, la forma en que encararon el tema de la tierra, su relación con las masas, etc.
