El Estado
La clave para la liberación del proletariado está en la destrucción del Estado de las clases explotadoras y la construcción de su Estado. Este es el instrumento más importante para su liberación. Es una ilusión funesta creer que se puede influenciar decisivamente sobre el Estado enemigo conquistando lo que los reformistas llaman “espacios de poder” (control de organizaciones sociales o incluso palancas de gobierno de esta sociedad) sin conquistar y destruir al viejo Estado y construyendo otro cuya esencia será diferente del Estado tradicional. Incluso históricamente allí donde se construyeron organizaciones de doble poder (del tipo de los soviets o los consejos de fábrica) sin destruir el viejo poder, éste, a poco andar, se reconstituyó de nuevo.
Para muestra basta un botón
Para muestra de las posiciones de la izquierda golpista, que confluían con el golpe institucional en marcha, basta citar la resolución del Congreso Nacional de Vanguardia Comunista de febrero-marzo de 1976, que definía como principal contradicción nacional la que existía entre la “gran burguesía nacional”, que representaba el gobierno peronista, y “las masas populares”. La contradicción con el imperialismo yanqui y otros imperialismos, planteó, se habían “colocado en un segundo plano”. Y por eso llamó a “desenmascarar y aislar al gobierno peronista” y “arrancar la renuncia de Isabel Perón y la convocatoria inmediata a elecciones”.
Hoy N°1838 28/10/2020