En su edición del viernes 2 de diciembre, el diario La Nación informó sobre la resolución que instruyó a las distribuidoras para que eliminen el subsidio estatal en las facturas de los barrios cerrados y las dos zonas más caras de la Capital Federal acompañada del formulario que los usuarios deben responder para continuar recibiendo el subsidio (ver hoy nº 1398). Junto a eso escribió que según “voceros del Ministerio de Planificación Federal, las primeras facturas con ese formulario serán repartidas a comienzos del mes próximo en un grupo de barrios que se anunciarán en los próximos días”, refiriéndose a las zonas del llamado cordón Norte de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.
Pero en la misma mañana del viernes 2, los ministros Julio de Vido y Amado Boudou anunciaron directamente la extensión de la quita de subsidios a todas esas zonas, agregando a las torres con “amenities” y a las dependencias gubernamentales, el alumbrado público y las autopistas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En cambio, nada dijeron sobre qué piensan hacer con el subsidio a los “ricos y famosos” que se anotaron (encabezados por la presidenta) en el “Registro de Renuncia Voluntaria”, al que no se le ha dado ninguna convalidación legal por lo que, hasta ahora, es mera propaganda.
Las cinco zonas que se agregaron a Puerto Madero y Barrio del Parque son Belgrano R, un corredor de avenida del Libertador que va desde el Monumento de los Españoles hasta Barrancas de Belgrano, y las zonas de Plaza San Martín, Catalinas Sur y la avenida Alvear en toda su extensión. Además, De Vido explicó que “torres con amenities” (que tienen, entre otros servicios, “salón de usos múltiples, pileta, gimnasio o cancha de tenis, al aire libre y con iluminación”), que se encuentren en las subzonas de coeficiente de ABL en un rango entre 1,50 y 2,00, también dejarán de recibir el subsidio. A su vez dijo que las zonas del conurbano bonaerense directamente excluidas del subsidio, son lugares del norte como La Horqueta y Barrancas, en San Isidro, y Punta Chica, en Victoria.
En el final, De Vido precisó que, con los nuevos 28.604 usuarios incluidos ahora en el retiro de subsidios, por 367 millones de pesos, el total desde que comenzó el proceso asciende a 275.504 usuarios y 4.847 millones de pesos. Una cifra que todavía es menos de la cuarta parte de los más de 20.000 millones que piensan “ahorrarse” cargándoselos a los hogares de clase media y de los trabajadores que no cumplan los requisitos de pobreza del formulario que comenzará a caer con las próximas facturas.
En cuanto a la eliminación de los subsidios a las dependencias gubernamentales, el alumbrado público y las autopistas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los funcionarios argumentaron que ello se debía a los aumentos en el ABL que implementó el gobierno porteño. “Todos los vecinos de la Ciudad saben que ha habido fuertes aumentos de la tasa de ABL, y no es razonable que si un gobierno les cobra aumentos por el servicio que le presta a los vecinos, el gobierno nacional se los siga subsidiando” a esa administración, enfatizó Amado Boudou. “Es una suerte de enriquecimiento sin causa del gobierno del ingeniero Macri”. A su turno, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, especificó que el retiro de subsidios a los servicios de electricidad, gas y agua, hasta ahora vigentes para el alumbrado público, de autopistas y de edificios de la Ciudad, incluye a 2.157 medidores e involucra un ahorro de 230,5 millones de pesos. n
