En mayo de 1811, la Junta de Buenos Aires, envió una misión a los Estados Unidos, compuesta por Diego Saavedra –hijo del presidente de la junta– y don Juan Pedro Aguirre, con el objetivo de comprar armas. Llegados a Washington, tuvieron una entrevista confidencial con Madison, y al otro día con su secretario de Estado Monroe, a quien le informan la intención de elevarse al rango de una nación independiente.
En mayo de 1811, la Junta de Buenos Aires, envió una misión a los Estados Unidos, compuesta por Diego Saavedra –hijo del presidente de la junta– y don Juan Pedro Aguirre, con el objetivo de comprar armas. Llegados a Washington, tuvieron una entrevista confidencial con Madison, y al otro día con su secretario de Estado Monroe, a quien le informan la intención de elevarse al rango de una nación independiente.
Con el visto bueno del gobierno, cierran con una empresa privada, la compra de 11.000 fusiles que llegaron al puerto de la Ensenada de Barragán, a bordo del Buque Norteamericano Liberty, en mayo de 1812.
En la conformación histórica de una nación independiente, la compra de armas para tener autonomía y fuerza militar propia es un tema de vital importancia y este hecho nos arroja luz sobre algunos entramados de alianzas internas y otras externas de los distintos sectores que disputaron la hegemonía, con posterioridad a mayo de 1810.
La misión fue conocida, porque el viaje y los designados para viajar, se publicó en La Gaceta; luego al trascender la historia de las Patricias Argentinas, en la biografía de Ángela Castelli, hija del patriota de mayo, se cuenta que organizó una colecta para pagar algunos fusiles de esta compra, difundiendo entre los aportantes un texto redactado por Monteagudo.
Por último, la valoración política institucional de esta compra de armas, la hace el profesor Luis V. Varela, en Historia Constitucional de la República Argentina, La Plata, 1910, tomo 1, pag. 233. Además, Demaria Rafael, en Historia de las armas de fuego en la Argentina, Bs. Aires 1972.
Es evidente que esta primera delegación a los Estados Unidos, inició una relación con Monroe, y este designó en forma casi inmediata una misión de observación, presidida por Theodorick Bland, personaje que vivió en el Río de La Plata, y produjo un informe al presidente fechado en Baltimore, el 2 de noviembre de 1818. Este informe revela un conocimiento profundo de los motivos políticos por los cuales Santa Fe y algunas provincias del litoral se desligaron de la dirección política de Buenos Aires y figuraban en ese momento histórico como aliados de Artigas.
Sobre esta segunda misión informativa y de espionaje, volveremos en la próxima nota dado que, junto con la que se produce años después con el informe de J. M. Forbes, al secretario Adams, 11 años en Buenos Aires, nos dan un panorama, aproximado, del seguimiento por parte de los Estados Unidos de la evolución de nuestros nacientes estados en la región y, al mismo tiempo, dan a conocer la ventaja en tiempo y poder que los ingleses lograron sobre otras potencias de la época, ventaja ésta que el informe Forbes reconoce explícitamente.