Arturo Botelli, hijo de Coco Botelli, es un reconocido escritor, músico y pintor salteño. Es licenciado en arte, profesor superior de música, pianista, hombre ligado a la cultura y a la docencia, le interesa el aspecto social, democratizar las instituciones y ser transparentes y honestos. Nuestro otro entrevistado es Rodolfo Zacarías, camarada, cofundador de la CCC en Salta, plantea democratizar la Municipalidad, democratizar el reclamo y democratizar la obra pública, que la gente indique cuáles son las prioridades.
– ¿Cómo llega Arturo “Pachula” Botelli al Frente Popular?
–Mis padres eran peronistas. Desde los 14 años yo era peronista y en la época que el peronismo estaba prohibido. A mí me fascinaba toda esa historia. Trabajé en algunas áreas en cultura municipal, en provincia estuve tres meses en el ‘95 y ‘96, ahí me desilusioné. Se vino la transformación del Estado, fue terrible. De la Escuela de Música nos echaron a 25 personas, de Cultura otro tanto y trabajé en la Fundación Salta, gratis, con Vide Bautista, haciendo el estatuto y al final nos querían dar el centro cuando nosotros teníamos la fundación, fue bien feo, porque inclusive estaba afiliado al Partido Justicialista.
En ciertas incursiones de amigos estuve en las primeras reuniones del Frente Grande. Yo era admirador de Germán Abdala, del grupo disidente del peronismo, antimenemista, pero siempre como ciudadano común. También lo vengo siguiendo hace años a Víctor De Gennaro, a Claudio Lozano, y cuando vino el año pasado al anfiteatro Cuchi Leguizamón, (presentación del Frente Popular) yo fui. Además ya veía los carteles de Edmundo Falú, de María Lapasset, a quien conozco a través de su labor en Apsades, y me impactó todo, me gustó, compré un pin. Más allá de la verborragia, de lo bien que se dirigen los jóvenes, de ver la Corriente Clasista Combativa, que uno se la pasa viendo en la calle, y ahora que la conozco más a fondo, gracias a Rodolfo Zacarías, la labor que realizan, me fui convenciendo cada vez más. Fui de nuevo a otro acto y un día me habla Falú, y me ofreció esto de ser candidato a intendente. Por supuesto me asustó aunque ya no lo estoy tanto, y así nos fuimos conociendo con Rodolfo, la Corriente, el PTP, y el apoyo de amigos que no quieren saber nada de los políticos, y yo esperando su negativa. Fue al contrario y así andando en mi Citroën 3CV pensando si iba a seguir renegando en el café o tomaría parte para intentar cambiar. Decidí intentar. Hasta donde veo el grupo es muy bueno, me surgen muchas ideas. Es la primera vez que milito abiertamente y soy candidato.
– ¿Cómo y para qué llega a formarse el Frente Popular?
Zacarías: Nosotros venimos de dos experiencias electorales, que fueron con los compañeros del MST, en Proyecto Sur y la otra también con el MST y CTA, con la personería del MST. En esas oportunidades fundamentalmente en la segunda, nos propusimos que conozcan nuestras fuerzas y afiliar a nuestro partido, que es el PTP. Esto sirvió para ganar experiencia y para que hoy estemos a casi un año de haber conseguido la personería del PTP. En ese recorrido nos conocimos bastante con UP. A su dirigente María Lapasset ya la conocía de Apsades. Cuando era la secretaria Gral. del gremio y yo era el Sec. Gral. del Sindicato de Televisión. En ese entonces era de la Comisión Directiva de la CGT y ella de la CTA, y aun así nos unía permanentemente la calle. Un largo camino de luchas con CCC y CTA, ante las distintas situaciones políticas de la provincia y del país. Ellos también tienen felizmente su personería y toda esa trayectoria hace que sigamos juntos, con las mismas necesidades de transformar esta política.
Es una experiencia al revés, como dice un gran amigo, Juan Pablo Ochoa: los políticos salen de sus casas y se lanzan a la campaña a decir que van a resolver los problemas de la gente, y nosotros podemos decir que las dos fuerzas que integran este frente (PTP y UP) primero se ocuparon de la gente y ahora, se lanzan al terreno electoral, y eso nos hizo confluir. Irónicamente podemos decir que la política de Menem, Duhalde, De la Rúa y Kirchner nos unió, pero la realidad es que esto también formó parte de la unidad que nosotros construimos con la lucha.
– ¿En qué contexto político–social se desarrollan estas elecciones provinciales del 2015?
Zacarías: Para nosotros es un muy buen momento, porque de hecho los de arriba están peleados. Las clases dominante han unido a dos que se han enfrentado en épocas pasadas, pero que son socios de grandes negocios, como es el terrateniente Olmedo y el ex gobernador de Salta y actual senador, Romero, que coquetea con Massa, mientras su candidato a vice coquetea con Macri. Abiertamente no lo dicen, pero expresa como están divididos por arriba y que se han tenido que juntar para dar pelea en esta provincia.
Por otro lado está Urtubey, que al día de hoy no resuelve, abiertamente, quién va a ser su vice. El que ya resolvió en privado luchar para ser gobernador, es el actual intendente de la capital, Miguel Isa. Aunque la política de fondo sea la misma; son expresiones de dos cosas distintas. Se unen en función de la necesidad de ellos, sus familiares, amigos y los grandes negociados que hay en la provincia y en la ciudad de Salta.
Eso también nos espanta a nosotros y nos une más, en la masa, en los barrios, nos une con la gente perjudicada por esta política, ya que tanto Romero como Urtubey llevan 20 años dirigiendo esta provincia, y además hace mucho más tiempo que viven de la política, y no resolvieron los problemas de la provincia, y de la gente. Es la “falsa polarización”, porque corresponden al mismo sector. La polarización en serio sería un sector o un candidato que represente a las clases dominante y otro que represente a los dominados. Y en este punto quiero decir algo del Partido Obrero, diferenciando que no son lo mismo que ellos, pero qué nos diferencia a nosotros del PO. Ellos luchan pero no tienen gestión. Tienen un diputado nacional, tres provinciales, una senadora, varios concejales en la provincia, en la capital salteña nueve concejales, y no se conoce una obra o un proyecto que ellos hayan obtenido para Salta. Nosotros, sin tener ningún funcionario nos enorgullecemos de las obras que han hecho los compañeros (ver nota aparte). Por eso tenemos una consigna que identifica a nuestro presidente del PTP (Monzón) y es que ha sabido unir lucha, gestión y administración.
Eso tenemos para ofrecerle a la sociedad salteña: la experiencia de haber luchado, de no haber traicionado, porque ofertas hemos tenido, la experiencia de gestión y la de administrar y que nadie pueda venir a “contarnos las costillas”. También ofrecemos candidatos como Edmundo Falú, un prestigioso médico cardiólogo, acompañado por Oscar Monzón, presidente del PTP, que tiene una larga trayectoria política en Salta y un análisis político extraordinario. María Lapasset, también médica cardióloga de niños, y ahora conociéndonos con “Pachula”, un compañero que lamento no haber conocido antes y con quien venimos coordinando y trabajando juntos, ya que él es el candidato a intendente capitalino y yo a 1º concejal.
– ¿Qué medidas propone el Frente Popular para transformar la ciudad, como dice en su pancarta?
Botelli: Lo primero son las auditorias, por el tema de los gastos y en el mismo nivel están todas las cuestiones de las tercerizaciones municipales. Con más educación, trabajo, cultura y deporte podemos sacar a nuestros jóvenes de las adicciones; para este tema hacer centros culturales, recreativos y deportivos, centros familiares de contención y tratamiento de las adicciones, parquización y juegos en las plazas de cada barrio, entre otras. Los primeros meses será investigar, auditar y trabajar con los concejales y equipos de trabajo en distintas áreas.
Zacarías: Si uno habla con un compañero trabajador, lo primordial es acabar con la corrupción y empezar a generar fuentes de trabajo genuino, que falta porque lo que sobra es corrupción; si vas a los barrios las madres te dicen que la preocupación central son las esquinas y las drogas, los matrimonios jóvenes quieren un lugar donde vivir, y eso también es una necesidad como la de todos los que necesitamos vivienda, que rápidamente se puede resolver. Hay mucha tierra ociosa en Salta que se utiliza nada más que para crédito, que terminamos pagando los salteños. La renta de eso es altísima, junto a los negociados con los bancos, entonces de ahí podríamos construir viviendas para miles de salteños.
Hay que atender todas las necesidades, pero hay que ver las prioridades: el hambre, en realidad la hambruna en Salta y el contexto político nos indica a nosotros que eso la gente lo tiene bien calado. Para atender todas las necesidades queremos tener concejales de cada barrio; por supuesto que son 300 y se eligen 21 concejales, entonces debemos ver prioridades y atender todas. Por ejemplo la droga, la violencia familiar y de género, reclamos sociales profundos en Salta. Comedores, indigentes, etc. Pero se conoce poco en Salta, salvo cuando a los medios nacionales les conviene y aparecen los chicos desnutridos. Hoy hablamos de chicos muertos, de 1.900 chicos que no son atendidos y que están dentro del grupo de riesgo, y más del 20% de nuestros salteñitos y salteñitas comen peor que los chanchos de la China. En 6 meses se puede acabar con la desnutrición en Salta. Olmedo, que quiere ser vicegobernador de Salta, produce alimentos para millones de personas, sin embargo donde él vive se mueren los chicos de hambre. Nosotros lo tomamos como compromiso, Falú y Monzón lo pueden hacer; hay condiciones para que primero coman los chicos nuestros y después los chanchos de la China.
– ¿Cómo encara la campaña el Frente Popular con escasos recursos económicos, para competir con las campañas faraónicas de los partidos burgueses?
Zacarías: No es fácil, pero es posible. Tenemos el ejemplo de Urundel donde sin recursos económicos llegó a concejal el compañero de la comunidad ava guaraní Germán “Gondi” Caraita, que ahora va por la intendencia. Es trabajar duro, boca a boca, uno por uno, con la familia, los vecinos, amigos, compañeros en cada lugar de trabajo, y tratar de llegar a todos los perjudicados de esta política que somos muchos más que los beneficiados. Es un trabajo a fuerza de militancia, en los barrios, en las redes sociales, en todos los medios tecnológicos, armando reuniones, asambleas para que el boca a boca llegue a las masas y pedir de una. Yo al que saludo le pido cuatro cosas: que me vote, que junte votos, que me dé plata o que me busque plata (risas). Esa es una parte de mi campaña de todos los días, apoyarme en la masa, esa que han castigado.
Botelli: Tenemos que empezar a creer en nosotros, aunque cueste.
