La CCC de la Zona Oeste llama a votar a la Bordó, planteando en el volante donde convoca a participar de la Marcha de las Economías Regionales: “… En esta situación es importante que los ferroviarios del Sarmiento fortalezcamos un camino de unidad y lucha como el que venimos recorriendo con la Bordó en el Cuerpo de Delegados, para enfrentar la ofensiva ajustadora del Gobierno e impulsar la confluencia de todo el campo popular hacia la liberación nacional y social de nuestra patria… Macri ha dicho que para mover los trenes sobran 2 de cada 3 ferroviarios actuales. Y han abierto las jubilaciones anticipadas, recordando una película que ya vimos en los ´90. Primero jubilaciones anticipadas, después retiros “voluntarios”; luego retiros compulsivos, y por último despidos. Así quedaron 80 mil ferroviarios en la calle, perdimos 30 mil Km de vías, y cientos de pueblos quedaron abandonados sin tren. El Gobierno habla de la reestructuración del Ferrocarril y anuncia millonarias inversiones para el “plan Belgrano”.
“Montan grandes negocios con sus socios locales (IECSA del primo de Macri) y extranjeros (Gella-italianos) como el Soterramiento del Sarmiento, que vienen a rematar lo que quedaba de una red ferroviaria integrada y federal, para convertirla en un medio de transporte exclusivamente urbano para el área metropolitana. Pero el plan más de fondo es mantener el negocio de la carga en manos de los grandes monopolios exportadores (Aceitera General Deheza, Techint, etc.), los mismos que gracias a las privatizaciones disponen de la red ferroviaria nacional para el transporte de “su carga”, en desmedro de los pequeños productores, las economías regionales, y el interés del país. Ahora con el Plan Belgrano anunciado pretenden reforzar este modelo de país agroexportador y dependiente, sacando la producción por Chile hacia el Pacífico y China en particular… Hechos como la salida de servicios de los trenes el pasado 21/10 por fallas en el suministro eléctrico vienen a demostrar que la “Revolución Ferroviaria” del Ministro Randazzo del anterior gobierno no era una recuperación de los trenes sino el remache de una nueva dependencia con los trenes chinos, mientras no se hacían las obras necesarias para que esos trenes circulen. Así seguimos con pocas formaciones y frecuencias que no dan abasto para transportar los cientos de miles de pasajeros del Oeste, lo que en particular hace que en horarios pico viajar sea una verdadera odisea. Al mismo tiempo cerraban Emfer y liquidaban la industria nacional ferroviaria, con la que podríamos fabricar nuestros propios trenes…”