Sobre las medidas llevadas a cabo desde la Juventud para enfrentar la pandemia del coronavirus Nerina nos comenta: “Nosotras cuando arrancó la cuarentena ajustamos, a partir de la necesidad que se vive, continuar con el comedor que funciona en la CAAC “Encendiendo la chispa” -ubicado en el barrio Finca Valdivia en la zona sur de la ciudad de Salta- siguiera funcionando, debido a que la situación de crisis hace que es muy difícil para las familias garantizar un plato de comida. Entendemos que las medidas llevadas a cabo por el gobierno nacional son justas, pero insuficientes, y lamentablemente en la provincia no hemos recibido el apoyo, la ayuda o la colaboración ni del gobierno de Gustavo Sáenz ni de la municipalidad capitalina, pero a pesar de eso seguimos trabajando.
“Desde que comenzó la cuarentena fue aumentando la cantidad de personas que se acercaban a retirar la vianda. Pasamos de entregar 150 viandas por día a 250 o 300 diarias, inclusive se acercan personas de barrios bastante alejados a retirar la comida. Hubo dos semanas en la que se funcionó gracias a la solidaridad y colaboración de la gente, de pequeños comerciantes como los de mercado Cofrutos, que todas las semanas nos donan cajones de verduras o bolsas de harina. Al ver que la necesidad está en todos lados, desde la JCR y el Movimiento Ni un pibe menos por la droga abrimos otros merenderos y comedores en la zona norte, sur y sudoeste, ya que queremos seguir militando y generando actividades para ser solidarios con el otro, tomando los recaudos sanitarios necesarios para no exponer nuestras vidas ni las de las personas que se acercan. En la actualidad repartimos cerca de 500 viandas en los comedores y 300 viandas en los merenderos.
Al hacer mención a las actividades relacionadas al tratamiento y acompañamiento de las adicciones, Nerina agrega: “Pudimos articular el funcionamiento de los compañeros y compañeras que trabajan en el espacio (la CAAC). Si bien no se podían realizar las actividades deportivas, se seguía funcionando a partir de garantizar el funcionamiento del comedor. A pesar de las dificultades, logramos mantener el apoyo escolar para los niños; el acompañamiento a las compañeras que sufren la violencia machista a través de las promotoras de la campaña por la Emergencia en violencia de género. En base a la tremenda crisis que se atraviesa seguimos brindando el acompañamiento psicológico a los jóvenes porque es una faceta que no se puede descuidar; reforzamos el acompañamiento, debido a la imposibilidad que encuentran las familias y los jóvenes sobre todo de salir a trabajar, lo que afecta su supervivencia diaria”, finaliza Nerina.
Hoy N° 1818 10/06/2020
