El gobernador de Entre Ríos Urribarri, apoyado por Zanini y De Vido se presenta como un fiel continuador del modelo de Cristina. E igual que el gobierno nacional, vende como progreso lo que es más dependencia. Hace poco un convenio con empresas y bancos chinos para hacer un millonario acueducto en beneficio de unos pocos grandes productores y ahora la venta de empresas entrerrianas, sin políticas que defiendan el mercado interno, no hacen otra cosa que profundizar la extranjerización.
La política económica de Urribarri, que es la de Cristina Kirchner, balancea como “avances del modelo industrializador” la cesión de empresas o cooperativas nacionales. Dos símbolos del otrora desarrollo industrializador en Entre Ríos: una, la Cooperativa Cotapa, que nucleaba a centenares de pequeños y medianos tamberos del departamento Paraná, y un frigorífico manufacturero exportador, el ex Vizental y ex JBS Swift (de capitales brasileños que lo cerraron ante el freno de las exportaciones de carne) ahora pasan a manos de un grupo que lo integran capitales chinos. Los productores y trabajadores entrerrianos, bien gracias.
Este al igual que el ex frigorífico Santa Elena (hoy en manos del amigo de Néstor Kichner: múltiple vaciador de empresas: Taselli) tenían un papel de sostén de la ganadería otrora principal rubro dentro del sector agropecuario entrerriano. Que a su vez ocupaban junto a otras plantas fabriles miles de puestos de trabajo en la provincia, hoy perdidos, por culpa de esta política del monocultivo sojero del kirchnerismo. Que a la vez promocionó con apoyo estatal a grupos amigos (Tres Arroyos, grupo Marsot, etc.), y alentó el consumo de carne de pollo a precios menores. Lo que no sería un problema en si mismo, sino fuera porque desaparecieron 10 millones de cabezas de ganado, miles de puestos de trabajo y miles de pequeños productores que arriendan esas tierras a la sojización. Estimulando a los frigoríficos avícolas con onerosos subsidios, a suplir la carne vacuna en la mesa de los argentinos por carne de pollo.
Entre las ofertas presentadas por ambas empresas, habría ganado la de Premieur SA en sociedad con Cartipam SA, una empresa nacional con capitales chinos.
Quién es quién
Cartipam SA es una firma de capitales chinos que se radicó en General Pico, La Pampa, con una planta que produce sulfato de condroitín, sustancia derivada de cartílagos vacunos. La producción es exportada a Estados Unidos, China, Holanda y Japón.
En su inscripción inicial en la AFIP, Cartipam explicitó que su objetivo era la “fabricación de sustancias químicas para la elaboración de medicamentos”. Más tarde, amplió sus fines, agregando “matanza de ganado excepto el bovino y procesamiento de su carne”.
En Premieur SA por su parte, la otra empresa que integra la UTE que ofertó por el Frigorífico San José, tiene como cara visible a su máximo ejecutivo, Juan Carlos Acevedo Díaz, y es propietaria de Ganadera Cañuelas SA Acevedo Díaz también participa de otra sociedad, cuya razón social es Lis Royal SA, ligada a las actividades agropecuarias.
Por todo ello otro modelo alternativo es posible y necesario, con un millón de chacras, que se base en un fuerte desarrollo nacional y del mercado interno, integral de todo lo que produce la Argentina y sus economías regionales. Pero solo lo puede hacer otro gobierno verdaderamente nacional y popular como el que impulsan el frente del Partido del Trabajo y del Pueblo y la Unidad Popular. PTP que se está construyendo en Entre Ríos para estar a la altura de las circunstancias.
