El radicalismo salió fortalecido dentro de Cambiemos ganando diputados, senadores e intendencias. Los cuatro diputados nacionales en disputa se reparten por mitad entre el FPV y Cambiemos. El Senado provincial pasa a ser opositor, de ser monocolor del FPV hasta ahora, a ser mayoría de la oposición, sumando Cambiemos un senador de Villaguay, terruño de Fuertes el candidato a gobernador de Massa. El PRO-UCR puso a De Angeli como candidato a gobernador, que sale segundo achicando la diferencia de las PASO.
Urribarri, quien fuera anunciado como posible ministro del Interior por Scioli si ganaba la presidencia, no pudo garantizarle el triunfo, aún muy reñido a nivel presidencial en Entre Ríos donde hay 1.000 votos de diferencia a favor de Macri y faltan escrutar un 8% de las mesas en esa categoría en Entre Ríos. El Frente Alternativa Progresista Popular recogió similar porcentaje a las PASO, un 2,6 % de los votos, emparejando ahora los votos a diputados provinciales con los de gobernador, por haberse hecho en parte una campaña para conseguir un diputado de izquierda en la provincia en base a propuestas concretas. Cabe acotar que Margarita Stolbizer iba sólo pegada con APP y no con el GEN que iba en Cambiemos y logró menos votos que la fórmula de la APP. El PTP en la APP votaba en blanco o nulo a presidente. El PS perdió un diputado provincial y dos concejales en Paraná.
Las sorpresas provinciales y nacionales ninguna encuesta las “captó”, pues como otras veces los cambios que vienen por lo bajo, no son captados de antemano. Pero tal vez algunas de las palabras que puedan sintetizar los resultados son “bronca y hartazgo” de no tener respuestas por parte de un gobierno provincial sordo a los reclamos de los trabajadores y productores, sumiso a un supuesto federalismo de obras, pero sin anclaje en las prioridades populares y provinciales. En la provincia esto se palpa en la ininterrumpida lucha de años de los docentes provinciales, sin respuestas, de los estatales sobre todo de salud por igual motivo, las economías regionales, la violencia de género y de víctimas del narcotráfico sin respuestas ni justicia, entre otras. El voto castigo atravesó todas las clases sociales.
El massismo repitió una buena elección (tercera fuerza) donde iba Fuertes y Busti en la dupla a gobernador y vice obteniendo el 16%.