La cuarentena no es para todos igual
El 40% de la sociedad en la pobreza y una parte en la indigencia, agudizó sus pésimas condiciones de vida. Los trabajadores informales, independientes, monotributistas, changarines se encuentran en grandes dificultades. El plus en la AUH y jubilación alivió la situación aunque los precios de los alimentos siguen subiendo.
La provincia y la municipalidad amenazan con no pagar en tiempo y forma los salarios, en esta situación de pandemia eso es criminal.
La cuarentena tampoco es viable para las mujeres que sufren violencia en sus hogares, la epidemia de los femicidios no se detuvo con la cuarentena. Hay que tomar medidas urgentes y efectivas para que quedarse en casa no sea sinónimo de violencia para las mujeres y la niñez.
El hambre y la pandemia
La emergencia alimentaria se agravó. Los comedores que mantienen las organizaciones como la CCC se ven desborgdados por la demanda y le están haciendo frente como pueden, con la solidaridad de los vecinos, poniendo lo poco que tienen, pero así no pueden seguir. No reciben ninguna ayuda de la provincia ni de la municipalidad. Es necesario el relevamiento de comedores y partidas urgentes de carne, lácteos, verduras, frutas y garrafas.
Se vienen los fríos, y el pico de contagiados se espera para el próximo mes. La Provincia debe atender estas urgencias:
- Una buena alimentación: La provincia puede comprar a precio de costo alimentos de industria cordobesa para abastecer a los comedores comunitarios y fortalecer y enriquecer los módulos de PAICOR y sumar nuevos beneficiarios.
- Vivienda digna, acceso a la calefacción y al agua corriente. Garrafa a precio de costo en las zonas donde no llega la red de gas.
- Programa vida digna o materiales para mejorar las viviendas antes de que venga lo más frío del invierno. Obra pública de red de agua y gas.
- Prohibir los aumentos de energía, alimentos, y otros servicios. La inflación en Córdoba es el doble que la nacional.
“Ganen menos”. Poner la industria al servicio de la estructura sanitaria y las necesidades populares
La crisis no es para todos. Las empresas alimenticias, los intermediarios y las cadenas de supermercados están haciendo grandes ganancias. Sólo por la tarjeta alimentar 7000 millones de pesos entran a este sector de Córdoba.
En esta situación de emergencia, ARCOR, AGD, Sancor, grandes frigoríficos y las químicas, deben producir y abastecer al Estado, a precio de costo.
Es posible reconvertir la industria para proveer al Estado de respiradores, medicamentos, vacunas, alcohol, ambos, gasas, mascarillas y todo lo necesario para hospitales, salitas y hospitales de campaña.
Para que no se pierda ni un puesto de trabajo, es necesario una política de asistencia de emergencia a las PyME, para que sostengan el salario sin despidos. Directamente del Estado sin ponerlas presas de la especulación bancaria y a tasa cero.
Fortalecer el sistema de salud público y unificar el sistema privado.
Años de defender la salud y la universidad pública nos ha dado el enorme potencial de tener un sistema público de salud y profesionales formados que demuestran el valor de esto. El laboratorio de hemoderivados es un ejemplo, poniendo la ciencia al servicio del combate contra la pandemia.
El aislamiento obligatorio da tiempo. Hay que seguir fortaleciendo el sistema de salud, que viene muy vapuleado. Cada invierno los hospitales colapsan por enfermedades respiratorias, la falta de insumos y de personal y hoy tienen que prepararse para una situación mucho peor. Es urgente mejorar las condiciones de trabajo y todas las medidas de seguridad para los trabajadores de la salud a la vez de fortalecer y mejorar la infraestructura.
Es necesario unificar el sistema privado y estatal bajo órbita del Estado para enfrentar la pandemia. El gobierno retrocedió ante la presión de juicios de los grupos privados, sigue siendo necesario lograrlo antes del pico de la pandemia.
Que pongan los que más tienen, no los trabajadores
Schiaretti amenaza con no pagar los sueldos, con la cuasi moneda, con descuentos a los empleados públicos… estamos en emergencia y es momento de sacarle a los que más tienen, no ajustar al pueblo.
Con un impuesto a las grandes fortunas como propone el Diputado Alderete del PTP se pueden destinar millones a la emergencia. Que pongan los principales beneficiarios de esta crisis (Arcor, Aceitera General Deheza, Bulgheroni, etc.) para afrontar la pandemia.
No a los descuentos a los empleados públicos. Es inaceptable que en estas condiciones se recorte salarios a los trabajadores públicos, ni a los docentes que ya están cobrando con descuentos. La provincia debe reforzar con un bono extraordinario a los trabajadores estatales y monotributistas que trabajan para el Estado que cobran por debajo de la canasta familiar.
Comités de crisis y protagonismo popular
Podemos enfrentar la pandemia, creando comités de emergencia por ciudad, pueblo y por barrio. Con la capacidad de organización que tiene nuestro pueblo a través de los cuerpos de delegados obreros, las organizaciones sociales, las sociedades de fomento, los clubes, las iglesias, que rodeen salas de atención primaria y las escuelas. En la ciudad de Córdoba hubo una reunión del consejo social donde se insta a crear el consejo por barrio, ese es el camino a seguir, para seguir de cerca cuestiones alimentarias, de acceso a la salud, aislamiento preventivo, etc.
Partido del Trabajo y del Pueblo, Córdoba 8 de abril 2020
