El empobrecido país centroamericano atraviesa su enésima crisis, esta vez al destaparse la malversación de fondos por parte del gobierno, de dinero proveniente de Petrocaribe, un programa de desarrollo patrocinado por Venezuela.
Antes de llegar al poder en 2017, Moses era el responsable de la empresa Agritrans, que recibió más de 33 millones de gourdes (más de 700.000 dólares estadounidenses) para un proyecto de carreteras nunca realizado.
Las manifestaciones se desarrollaron en la capital Puerto Príncipe durante varios días, retomando las marchas de febrero, que se cobraron varios muertos, y llevaron al gobierno a una crisis institucional, por la renuncia del gabinete, nunca reemplazado.
Sectores de la Iglesia Católica han dado su apoyo a los manifestantes, que, indignados con un informe del Tribunal Superior de Cuentas del 31 de mayo sobre la mala gestión de la ayuda de Venezuela a Haití, vienen protagonizando marchas y cortes de calle.
Las protestas, en un país donde más de la mitad de la población es menor de 20 años, el 60% de la población vive por debajo del umbral de pobreza, se están concentrando en exigir la salida del poder de Jovenel Moses y el arresto y juicio de todos los involucrados en el despilfarro de los fondos de PetroCaribe.
Hoy N° 1771 19/06/2019
