Según informó la dirección del Indec sobre algunos resultados del Censo Nacional Agropecuario de 2018 todavía no publicado, el número de establecimientos disminuyó de 330.000 en 2002 a 250.880 el año pasado. Es decir que entre 2002 y 2018 han desaparecido cerca de 80.000 explotaciones, sin que todavía se conozcan los datos sobre su distribución por el tamaño de los establecimientos.
Si bien puede considerarse que esto es parte de una tendencia mundial a la concentración monopolista, llama la atención por lo fuerte y prolongado de este proceso en el caso de nuestro país, incluso en relación a los demás países de la región. Porque aquí es la consecuencia de la contrarreforma agraria iniciada en 1967 con la Ley Raggio bajo la dictadura de Onganía y profundizada por las políticas oligárquicas de la dictadura violovidelista y de los gobiernos constitucionales que las siguieron, como ocurrió con el macrismo.
En el nuevo Censo para 2018 se relevaron 206,7 millones de hectáreas, en las que se censaron 250.881 explotaciones agropecuarias (EAP) con 732.986 residentes. De ese total, 222.201 corresponden a EAP con límites definidos, mientras que 22.506 no tienen límites definidos y 6.174 son mixtas. En cuanto al régimen de tenencia de la tierra y uso de la misma, 69% de las EAP son explotadas por sus titulares (directamente o a través de contratistas), mientras que 19% corresponden a arrendamientos. Respecto de las primeras se estimaron en más de 68 millones de hectáreas los servicios con maquinarias agrícolas contratadas con un llamativo total de más de 31.000 contratistas. En relación a los medios de producción se registraron 37.780 máquinas acondicionadoras de forrajes, frente a las 74.956 sembradoras, 23.475 cosechadoras y algo más de 200.000 tractores.
Según el informe, de las 157 millones de hectáreas ocupadas por explotaciones, 33.182.639 hectáreas fueron implantadas con algún cultivo: 38,5% fueron sembradas con oleaginosas, 30,4% con cereales y el resto serían forrajeras. En cuanto a las EAP destinadas a ganadería son 130.803 donde fueron relevados 40,41 millones de cabezas vacunas (que al igual que la cantidad de productores, muestra una fuerte caída respecto a 2002); 8,6 millones de ovinos; 2,57 millones de caprinos; 3,6 millones de cerdos y 908.288 yeguarizos, todo al 30 de junio.
En lo que respecta a la disminución del ganado vacuno, si bien se presentan como positivas las crecientes exportaciones de carne a China, surgen crecientes alertas sobre los riesgos que conlleva la muy alta faena de hembras que implican las mismas, haciendo éstas superen en promedio el 48% del total de las exportaciones bobinas, lo que se califica como “umbral de liquidación ganadera”.
Hoy N° 1791 13/10/2019