1. Un duro golpe a Milei
La comunidad universitaria, abrazada al pueblo, le ganó la calle a Milei con una multitudinaria movilización en todo el país. Fue una gran derrota de la política del gobierno.
No le sirve, al mentiroso el intento de achicar la magnitud de la movilización. Los drones muestran la verdad. Fue de 800.000 en la CABA, y un total de más de un millón en el país. Grandes concentraciones en muchas ciudades y pueblos, en algunas a pesar de la lluvia.
Milei sufrió la marcha de protesta más grande desde la última década. La jornada mostró la bronca contra el Gobierno de un enorme sector popular. Parte de los que movilizaron lo votaron hace apenas 5 meses. Participaron todas las fuerzas de un amplio arco de la oposición, orgánica o no orgánica. Se sumó un sector de radicales y de la Coalición Cívica.
El corazón de la gigantesca movida fue la enorme oleada de la juventud. Un sector organizado, y miles y miles de pibes y pibas en grupos más grandes o más chicos, unos mostrando libros, otros a San Martín, a Juana Azurduy, y decenas de miles de carteles caseros mostrando sus reclamos y anhelos.
Muchos jóvenes fueron junto a sus familias, unidas en la lucha por un futuro para sus hijos.
Fue un encuentro histórico el apoyo de la CGT, las CTA y las organizaciones sociales. Una piba reporteada por la TV dijo: “Como en el Cordobazo: juntos obreros y estudiantes”.
Esa enorme masa cantó en defensa de la universidad pública y la patria, y muchos repudiando a Milei y su gobierno.
También, echaron a algunos provocadores, como el dirigente radical Rodrigo de Loredo en Córdoba.
El gobierno preparó un operativo de represión uniendo el aparato del Ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de Patricia Bullrich, con el del gobierno de Jorge Macri en CABA, confiado que semejante aparato iba a controlar la movilización. Fracasó.
La movilización demostró que cuando el pueblo se une no hay protocolos que valgan ¿Qué hubiera pasado si reprimían? Una pueblada.
2. “El arriba nervioso y el abajo que se mueve”
La inmensa movilización mostró enfrentamientos en el gobierno. La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, le tira el fardo al ministro de Economía Caputo por no liberar los fondos para las universidades. Milei se lava las manos, defiende a Caputo y descarga en sus ministros.
La ministra paga porque la Secretaría de Educación es parte de su Ministerio y las resoluciones son con su firma. En Capital Humano se vienen yendo funcionarios en distintas áreas. Horas antes de la marcha universitaria presentó su renuncia el funcionario más íntimo de la ministra, Maximiliano Keczeli.
Milei, tras la marcha, primero se instaló tras su computadora y reprodujo las barbaridades que publica su “aparato de provocaciones” en las redes sociales. “Lágrimas de zurdos”, “Chorros, corruptos y vagos”, soltó, en línea con lo afirmado por su legislador porteño Ramiro Marra, que escribió “El que no lo ve es porque no quiere. Defendamos la educación pública, pero vamos a eliminar el curro político”.
También atacó a sus aliados golpeando al radicalismo: “Lo interesante de los acontecimientos del día de la fecha en Argentina es que va quedando archivo de las ansias golpistas del radicalismo y como han ensuciado la palabra ‘Democracia’”.
El presidente luego retrocedió: “Vamos a garantizar los fondos para el funcionamiento de las universidades”, dijo. Habrá que ver si cumple.
Tras la histórica jornada en defensa de la universidad pública, el Frente Sindical de Universidades Nacionales (Conadu Histórica – Conadu – Fedun – Ctera – Fagdut – Fatun – UDA), afirmó “De no haber una propuesta concreta de recomposición salarial, el Frente Sindical profundizará el plan de lucha en las Universidades”.
Por el lado de los estudiantes, crece el debate en las aulas y pasillos ¿Qué hacemos si el gobierno no afloja? Y se proponen nuevas medidas de lucha.
3. Castigan al pueblo y engordan a millonarios
Milei, Villarruel, Karina, Caputo, Menem y demás personajes de la corte del presidente, van quedando en evidencia: son reaccionarios y fascistas.
Han hachado los salarios, las jubilaciones y pensiones, los planes sociales. Agravaron las condiciones de vida de trabajadores, campesinos, originarios, estudiantes y demás sectores del pueblo.
Grandes empresas suspenden o despiden miles de trabajadores. Centenares de pymes están cerca de bajar las persianas. Dejaron en la calle a miles de trabajadores del Estado.
Han destruido organismos de la ciencia y de la cultura nacionales. Se arrodillan delante de Estados Unidos, Gran Bretaña e Israel, piden la incorporación de la Argentina a la OTAN, y ofrecen el envío de tropas a países en guerra.
Este gobierno engorda las ganancias de un puñado de monopolios imperialistas y oligarcas latifundistas. Impulsa la primarización de nuestra economía y la extranjerización de nuestros recursos estratégicos.
Milei se la pasa insultando a “los políticos”, y Karina y Menem están armando un partido. Villarruel visita regimientos militares reivindicando a los genocidas de la dictadura.
El ministro de Economía Caputo es un mentiroso serial, famoso por ser uno de los responsables de la “fuga” a favor de banqueros y monopolios de los miles de millones de dólares que el FMI le dio al gobierno de Macri.
Ahora Caputo dijo que tenía acordado un préstamo del FMI de 15.000 millones de dólares. El FMI dijo que no nos va a dar ni un dólar. Ahora, mendigando, recorre el BID, la CAF y el Banco Mundial.
El presidente del Banco Central salió corriendo a China junto a la canciller Mondino: intentan renegociar el swap por 6 mil millones de dólares, pero el gobierno imperialista de Xi Jinping no quiere renovar. Mientras Mondino y Bausili estaban en viaje, el diputado oficialista Espert se reunía con la representante de Taiwán en la Argentina. Parece que una parte del gobierno quiere volar los puentes con China.
Milei sólo se reúne con la casta empresarial de la Argentina. Así, en un foro en Bariloche dijo que iban a abrir el blanqueo de los dólares sin preguntar de dónde vienen. El Grupo de Acción Financiera Internacional, organización intergubernamental de los países integrantes del G-7, especialista en el tema, afirmó: “Argentina se convertirá en un paraíso fiscal” de narcos.
Milei, el día anterior a la gigantesca marcha en defensa de las universidades públicas, se jactó en cadena nacional de haber conseguido “superávit fiscal”, ocultando que lo que hizo fue un ajuste brutal, cuyo peso principal recayó en las y los jubilados, además de dejar de pagar a las provincias, a la salud y la educación pública, dejar de mandar comida a los más necesitados, etc.
La economía de Argentina está en crisis. En febrero cayó por cuarto mes consecutivo, a medida que se afianzaba el plan de Milei.
La actividad económica disminuyó un 3,2% en febrero respecto al año anterior. Las ventas de los supermercados se desplomaron en febrero y acumularon una baja del 12,7% en el bimestre
La construcción sufrió una caída de un 24,6% anual en febrero en tanto que el gasto de las pequeñas y medianas empresas —el mayor sector generador de empleo de Argentina— mostró una baja de un 12,6% en marzo.
El gobierno anunció que el 30 de abril pagará los vencimientos del mes al FMI, 1.940 millones de dólares. En mayo tiene que pagar otros 857 millones de dólares. Mientras niega fondos a los comedores populares, a los pacientes oncológicos, a la educación, la salud, la ciencia y la cultura, paga puntualmente una deuda externa infame.
4. Un paquete de leyes contra el pueblo
En ese contexto, el lunes 29, al cierre de esta edición, el gobierno intentaba hacer pasar la nueva versión de la Ley Ómnibus en la Cámara de Diputados, y un “paquete fiscal”.
Pese a los cambios, esta ley conserva lo fundamental: privatizar empresas y organismos estatales; meter una reaccionaria reforma laboral contra los derechos individuales y colectivos de las y los trabajadores; volver a poner el mal llamado impuesto a las ganancias sobre los salarios de más de un millón de empleados registrados; reducir el impuesto a los bienes personales, que beneficia a los 120 mil más ricos de la población.
Además, esta ley le da “facultades delegadas” al poder ejecutivo, es decir que decida sin pasar por el Congreso, “en materia administrativa, económica, financiera y energética” por un año. También pasa el Fondo de Garantía Sustentable de la Anses (el dinero de todas y todos los trabajadores) al Tesoro Nacional, y habilita la libre exportación de todos los hidrocarburos y gas. Elimina la moratoria previsional, privando a millones de la posibilidad de jubilarse.
El gobierno consiguió avanzar en este proyecto con la complicidad de diputadas y diputados del bloque de la UCR y del de Hacemos, que dirige Pichetto. Algunos, de manera vergonzante, firmaron el dictamen de comisión en “disidencia parcial”. Tienen temor que si votan el blanqueo que redactó el Gobierno: “Podemos terminar presos”, porque interpretan que es una invitación a los fondos del narcotráfico.
Distintas organizaciones sociales y políticas, entre ellas nuestro PCR, la CCC y la UTEP, llamaron a movilizar el 29 al Congreso, en repudio a esta ley reaccionaria y entreguista.
De todos modos, cualquiera sea el resultado de la votación en la Cámara de Diputados, deberá luego discutirse y votar en el Senado.
5. Más disputa imperialista y más guerra
Se agrava la disputa imperialista y crecen las guerras.
El presidente yanqui Joe Biden firmó la ley que autoriza un multimillonario paquete de asistencia militar para Ucrania, Israel y Taiwán. Se trata de armas por 95.000 millones de dólares aprobado por el Congreso.
Tras la incursión del grupo Hamás en territorio israelí, de la que se cumplieron 200 días la semana pasada, Israel profundiza su invasión a la Franja de Gaza, cometiendo un genocidio que se ha cobrado la vida de más de 35 mil palestinos. Ahora el ejército israelí amenaza con entrar en Rafah, ciudad del sur de Gaza fronteriza con Egipto, donde hay más de un millón de desplazados. El gobierno de Netanyahu argumenta que Rafa es “el último gran bastión de Hamás”.
En Estados Unidos, donde el crecimiento económico cayó a un mínimo de casi dos años el último trimestre y subió la inflación, se multiplican las protestas de estudiantes universitarios contra el genocidio en Gaza. Pese a la brutal represión policial, crecen los campamentos en distintas universidades y suman apoyos de otros sectores. Este movimiento comienza a extenderse en Canadá y países de Europa.
6. El Primero de Mayo en las calles contra el hambre y la entrega
La gran movilización popular del 23 de abril en defensa de una universidad pública, laica, gratuita y de calidad mostró el avance de la unidad en las luchas contra el gobierno de Milei.
Hay un cambio en la situación política. Miles se suman a la pelea, incluso muchas y muchos que votaron a este gobierno.
La semana pasada también se desarrollaron jornadas de lucha y paros de estatales en muchos lugares del país. Enfrentan no sólo el ajuste y los despidos del Estado nacional, sino a gobiernos provinciales que aplican esta misma política, dejando a miles de compañeras y compañeros en la calle.
Movilizaron las y los bancarios al Congreso reclamando contra la pretensión del gobierno de privatizar el Banco Nación. Lograron que lo saquen de la lista de privatizaciones de la nueva Ley Ómnibus, pero la lucha sigue porque el gobierno no cede en sus intenciones.
El sábado 27, las y los obreros del Astillero Río Santiago participaron del acto multisectorial por “soberanía, producción, trabajo y el Canal Magdalena” en el Puerto de La Plata.
El lunes 29, un congreso de delegados de la UOM discutía nuevas medidas de fuerza ante la negativa de las grandes patronales del sector siderúrgico a aumentar sus salarios, congelados desde noviembre.
El Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) lanza este lunes un paro por tiempo indeterminado contra el intento de reinstalación del impuesto a las ganancias. Esto frenará las exportaciones de granos.
La Conferencia Nacional de nuestro PCR, a comienzos de abril reafirmó “la necesidad de avanzar en la más amplia unidad de los sectores populares, patrióticos y democráticos, para frenar la ofensiva reaccionaria y represiva del gobierno de Milei. Jerarquizando la pelea por un nuevo paro nacional activo y multisectorial contra esta política de hambre, despidos y entrega de la soberanía nacional”.
Desde el PCR y la JCR planteamos desde el mismo triunfo electoral de Milei que este gobierno representa al sector más reaccionario del bloque de las clases dominantes, y que íbamos a enfrentar su plan de hambre y entrega, que no pasa sin represión.
Nos mantenemos al frente de las luchas, en estos tiempos tormentosos, en los que “Tenemos que prepararnos y preparar a las masas para poder cumplir nuestro rol”, como planteó nuestro secretario general Jacinto Roldán en la Conferencia.
Para eso avanzamos en cumplir los objetivos del Mes de la Prensa revolucionaria, de nuestro periódico y de la revista Chispa de la JCR, impulsando un salto en la afiliación y una campaña de reempadronamiento para garantizar un puesto de lucha y de protagonismo a las y los miles de afiliados de nuestro Partido y de la JCR.
En las vísperas de un nuevo Día Internacional de las y los Trabajadores, el Primero de Mayo, saldremos a las calles en nuestro país junto a la clase obrera y los sectores populares, unidos a todas y todos los trabajadores del mundo que volverán a reclamar por sus derechos, ratificando que son los portadores de una nueva sociedad.
En la Argentina trabajaremos para que los actos del Primero de Mayo sean masivos y unitarios, en camino a garantizar un gran paro nacional el 9 de mayo.
Vamos a los grandes debates que se están dando en los lugares de trabajo, vivienda y estudio, reafirmando la consigna de “Torcerle el brazo a la política de Milei”, porque peleamos para avanzar en la lucha por un gobierno verdaderamente de unidad popular, patriótica y democrática, en el camino de una salida revolucionaria que termine con el latifundio y la dependencia, y así tener una patria que garantice la comida, la salud, el techo, la tierra, el trabajo, la educación, la soberanía y los derechos para todas y todos los que habitan nuestro suelo.
Escriben Ricardo Fierro y Germán Vidal
Centenares de miles desbordaron Plaza de Mayo y coparon las calles de todo el país contra el ajuste presupuestario a las universidades nacionales que impuso el gobierno. Foto: Cabecera de la columna de la CEPA marchando a Plaza de Mayo.
