Cuando escribimos esta nota lo hacemos con una profunda emoción y alegría porque después de muchos años una gran huelga de los docentes de ADES, secundaria, de Montevideo y San José, junto al paro y movilizaciones de Ademu (magisterio) Afutu (universidad del trabajo) y Affur (funcionarios de la universidad), Feeuu (estudiantes universitarios) y Ceipa (formación docente) se abrió paso y conmueve al país.
Cuando escribimos esta nota lo hacemos con una profunda emoción y alegría porque después de muchos años una gran huelga de los docentes de ADES, secundaria, de Montevideo y San José, junto al paro y movilizaciones de Ademu (magisterio) Afutu (universidad del trabajo) y Affur (funcionarios de la universidad), Feeuu (estudiantes universitarios) y Ceipa (formación docente) se abrió paso y conmueve al país.
Esta huelga y las movilizaciones iniciadas el día 20/6, con paros y decenas de ocupaciones, fueron decididas en asambleas democráticas de los docentes y funcionarios en sus sindicatos y no en alguna oficina de burócratas del gobierno del oportunismo o en una Sociedad Anónima donde se decide entre pocos poderosos y por su capital.
Esta huelga y estas movilizaciones históricas se abrieron paso en contra del oportunismo en los sindicatos, estos verdaderos agentes de las clases dominantes y el gobierno en el movimiento obrero, que intentaron cerrarle el paso y perdieron, luego se montan a la lucha mientras siguen trabajando y maquinando permanentemente para levantar y entregar el conflicto.
Hacen esto al mismo tiempo que se reúnen públicamente en un Frente Sindical del FA, “para enfrentar el avance de los radicales en el movimiento sindical”. Es que sintieron el castigo de la clase obrera, que en sindicatos importantes, como ADES -Montevideo, Adeom, Afcasmu y UTHC eligieron en estos meses a las agrupaciones clasistas como mayoría en sus direcciones, preparando un camino de lucha imprescindible para pelear por un aumento salarial importante y mejor presupuesto para la educación, salud y vivienda popular, en la última Rendición de Cuentas del período.
La necesidad de lucha por un salariazo, principalmente por un Salario Mínimo Nacional de media canasta, se da también en el sector privado donde muchos sindicatos están dando ya la pelea ante los Consejos de Salarios.
Los dirigentes oportunistas, del PCU revisionista y de la socialdemocracia, en las distintas variantes que tiene el FA, dividen al movimiento obrero e impidieron, aunque esta vez solo por un voto, en la reciente Mesa Representativa del Pit-Cnt, la realización de un paro general para la unificación de las luchas en un momento clave.
El gobierno en dificultades pero plata hay
En el marco de una crisis capitalista internacional que persiste y día a día golpea a la región y al país, situación que los ha obligado incluso a cambios en la política monetaria, donde se revela también, la entrega de miles de millones de dólares estos años a los especuladores internacionales, a través de las Letras de Regulación Monetaria, el gobierno tiene que enfrentar esta lucha por salarios y presupuesto.
“Algo habrá, lo estamos estudiando” versea el presidente Mujica, mientras los trabajadores sacrifican salarios por la huelga. Para quedar bien con los que luchan algunos oportunistas, incluso con cargos de gobierno importantes, hablan de tocar las reservas, mientras el vicepresidente Astori, que blanqueó la deuda externa heredada de la dictadura y ha impulsado esta política económica que profundizó la entrega y la dependencia del país al imperialismo, sale a “defender” las sacrosantas reservas. Dice que “sería peligroso usarlas para gastos corrientes” como los planteados en las reivindicaciones salariales. Confiesa entonces que esas reservas de más de 14.000 millones de dólares, de las cuales una parte son encajes de los bancos y hay una parte de libre disponibilidad, están para otra cosa, “garantizan el pago de la deuda” y como ya lo vimos en el pasado están para cubrir los desfalcos que cada tantos años hacen los banqueros.
Plata hay, se debe y puede sacar, no solo de las reservas, sino del oprobioso pago de la deuda externa y con una reforma impositiva que grave progresivamente al gran capital y a los grandes latifundios y no a los trabajadores con el IVA del 22% y el IRPF. Extender, unificar y profundizar al máximo las luchas en curso es el camino para lograr las reivindicaciones y también para abrir paso a una nueva situación de lucha de nuestro pueblo que se arrime al fogón de las luchas populares que recorren el mundo, como en Turquía, Grecia y Brasil.
¡Arriba los que luchan! n
Ricardo Cohen
Secretario general del PCR del Uruguay