El Frente Popular pudo dar batalla en todos los municipios en los que logramos pasar en abril, siempre en medio de la polarización Urtubey-Romero, que se tensó los últimos días de campaña.
El trabajo realizado dejó grandes enseñanzas en un terreno marcado por las reglas de juego que impuso el kirchnerismo y el urtubeycismo con leyes nacionales y provinciales proscriptivas.
El Frente Popular pudo dar batalla en todos los municipios en los que logramos pasar en abril, siempre en medio de la polarización Urtubey-Romero, que se tensó los últimos días de campaña.
El trabajo realizado dejó grandes enseñanzas en un terreno marcado por las reglas de juego que impuso el kirchnerismo y el urtubeycismo con leyes nacionales y provinciales proscriptivas.
Estos dos sectores de las clases dominantes salteñas desplegaron en toda la provincia una maquinaria electoral de dádivas y asistencialismo, saturaron los medios masivos de comunicación y el espacio público con miles de gigantografías y todo tipo de propaganda estática; llegaron a pagar hasta $500 cada voto. Los electores habilitados fueron 931.213 y votaron para todas las categorías 685.782 (73,53%).
Así, Urtubey obtuvo 339.754 votos (51,22%), el Frente Romero-Olmedo 203.236 votos (30,64%), el Partido Obrero 41.293 (6,22%) y el Frente Popular 11.618 (1,75%).
La capital
Urtubey perdió a manos de Romero las intendencias de Capital, San Lorenzo, Cerrillos, Güemes, Rosario de Lerma, Cachi, Payogasta, Aguas Blancas y El Jardín, entre otros. La Capital, el distrito más importante de Salta, estará gobernado por Gustavo Sáenz, hombre vinculado a Romero y a Massa; el Concejo Deliberante estará conformado por seis bloques con mayoría del Frente Romero + Olmedo. El segundo bloque con mayor cantidad de miembros será el del Partido de la Victoria, con cuatro bancas. El 11,6% de los votos fueron en blanco en la categoría de concejales de la ciudad de Salta. El Partido Obrero, que tiene actualmente nueve concejales, quedará con tres; y el Partido Justicialista tendrá también tres representantes.
La novedad fue el PRO, que ganó tres bancas y tendrá ediles por primera vez. También el Frente UCR – UNEN – PS logró dos concejales. Este esquema en el Concejo deja en minoría al intendente electo con sólo nueve de los 21 concejales.
Nuestro trabajo
En Urundel recibimos un duro golpe, y el compañero Gondi Caraita perdió la concejalía. Nos pusieron en la mira y trabajaron sistemáticamente compañero por compañero, como dijimos pagaron $500 cada voto. Ahora tendremos que analizar cada paso, los aciertos y los errores, para seguir trabajando en la construcción del Frente Popular y del Partido del Trabajo y del Pueblo.
El trabajo en estas dos campañas nos abrió la cabeza y nos dejó un mapa muy distinto; lo ganado en organización fue mucho: construimos entre los más oprimidos y olvidados CCC, PTP y Frente Popular en simultáneo. Trabajamos con los dos brazos: el de la organización y lucha, y el de la construcción electoral. Pasamos de estar en dos comunidades originarias a ocho.
De todo este trabajo lo más importante es la instalación del Frente Popular como nueva fuerza política; el crecimiento y consolidación del PTP, de la CCC y de nuestro querido Partido Comunista Revolucionario
Crecimos en influencia territorial y política, el PTP se encamina a conformar sus comités en 15 municipios; trabamos relaciones con medios en toda la provincia. Miles de compañeros se sumaron a las campañas y trabajaron como candidatos, fiscales, choferes, en la cocina y en la pelea del voto cara a cara.
Agradecemos el esfuerzo de cada compañera y compañero que colaboró desde su lugar, en las fincas, en las comunidades, en los barrios y en las escuelas para enfrentar una vez más las políticas de hambre y entrega a las que nos someten. El crecimiento del Frente Popular marcó un camino y por él transitaremos rumbo a las presidenciales de octubre.