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24 de March de 2020

Los jóvenes al frente en esta emergencia sanitaria

Conversamos con el camarada Luciano Álvarez, secretario general de la JCR, para conocer cómo la Jota encara esta lucha por la organización popular contra el coronavirus.

En la JCR tomamos esta pelea de entrada. Después de la reunión del Comité Central del Partido del 14 y 15 de marzo donde discutimos cómo actuar frente a la pandemia, convocamos el lunes 16 a una reunión de secretarios de Capital y Gran Buenos Aires para poner a la Juventud de cara a la lucha política para que el pueblo tome en sus manos este problema. Veíamos que se venía una situación cada vez más difícil, y que era inevitable el aislamiento generalizado que decretó el gobierno.

Me parece que fue bueno hacer esa reunión. El mismo lunes a la noche hicimos un comunicado para toda la JCR planteando en primer lugar que había que poner a la Juventud de cara a la pelea política por organizar a las masas y porque el pueblo tome este problema en sus manos. Los primeros días: lunes, martes, miércoles hubo una muy buena respuesta de las compañeras y compañeros en todo el país. Con algunos hubo más debates porque tenían la idea de quedarse adentro de la casa, pero la fuimos ganando, y la mayoría de la JCR y los movimientos en los que participamos se volcó de distintas maneras para ponerse al frente y a disposición para abordar esta emergencia sanitaria.

Porque como planteamos en ese comunicado, acá hay una Juventud que pelea por ser comunista, y los comunistas tienen que ponerse al frente de la pelea contra el coronavirus. Tenemos en cuenta los que son población de riesgo, pero los jóvenes comunistas tienen que estar a la altura y eso es estar al servicio del pueblo en una situación tan difícil como esta. En esa idea que decía el Che, que los jóvenes comunistas tenemos que ser tan humanos como lo mejor del humano.

Sabemos además que a los jóvenes es al sector que menos golpea este coronavirus. Desde ya tomamos todos los recaudos, y no queremos ser factor de contagio. Le hemos planteado a nuestros compañeros, por ejemplo universitarios, que viven con adultos mayores, que se vayan de la casa y se junten a vivir tres o cuatro en un lugar. Para que puedan moverse, sin contagiar a nadie.

En la Universidad, estamos en la pelea de juntar donaciones, la preparación de alcohol en gel en una cantidad de lugares, y en el armado de brigadas, particularmente de los estudiantes de medicina avanzados. La Universidad Nacional de Rosario puso sus instalaciones para fabricar respiradores artificiales y alcohol en gel. Vamos empalmando la fuerza universitaria estudiantil con algunas autoridades universitarias que registran la situación, hay otras que tienen una actitud que no está a la altura. Entendemos que las contradicciones entre estudiantes y autoridades pasan a un segundo plano porque tenemos que transformar esto en una causa nacional.

Con las brigadas, se nos creó una situación a partir de las medidas de aislamiento general, porque el centro está en la organización barrio por barrio, no desde afuera. Hay que buscar los caminos para que cada uno tenga algo para hacer, de acuerdo a sus posibilidades.

Nosotros estamos de acuerdo con la cuarentena obligatoria, pero trabajamos para que la pueda hacer realmente todo el mundo. Acá no estamos en Europa. En nuestro país hay 40% de pobreza. En esas condiciones, una parte tiene que salir para que todos puedan hacer la cuarentena. También son un factor de riesgo el hambre y la pobreza, que agravan el problema sanitario.

Esa fue una discusión. Porque no queremos violar la cuarentena, pero no nos podemos quedar en la casa tranquilos sabiendo que hay un 40% que no la puede hacer. Nos apoyamos en las decisiones correctas del gobierno, como exceptuar de la cuarentena a los que sostienen los comedores populares.

El gobierno va tomando medidas, aumentando la entrega de alimentos, y está en discusión un bono de $5000 para los que no cobran ningún plan social. Urge que esas medidas se garanticen y aceleren el paso, absolutamente todos los recursos tienen que estar puestos en esta emergencia, para garantizar la comida y para fortalecer el sistema de salud.

También registramos que empezamos a tener problemas con las fuerzas represivas en algunos lugares. La militarización no es el camino. En Jujuy la policía provincial es de terror, porque Gerardo Morales es un fascista con o sin coronavirus, y usa esta situación para sacar a la calle la policía y reprimir a las organizaciones que intentan tomar en sus manos la solidaridad. Lo mismo pasa en Mendoza. Meter a la policía y las fuerzas represivas en la calle es desconocer lo que nosotros ya hemos planteado, que Patricia Bullrich sigue teniendo un peso muy grande en las fuerzas represivas del Estado. Porque el coronavirus no termina con la disputa por el sector hegemónico de las clases dominantes, esas contradicciones siguen operando y este estado sigue siendo el estado de las clases dominantes.

La pelea contra la pandemia es una causa nacional que exige la unidad y el protagonismo de todos, aunque no confiamos ni un cachito así en Gerardo Morales, Berni o Cornejo. Que además lo único que hacen es empeorar la situación.

Estamos haciendo una muy buena experiencia con una colecta a través de redes sociales, con el sistema de Mercado Pago, en las distintas zonas. Hay mucha gente que quiere ayudar de alguna manera.

Vamos dando pasos en armar nuestro ejército en esta guerra que se tiene que transformar en una causa nacional, y para eso como plantea Jacinto Roldan el centro de nuestra actividad pasa a estar en los barrios. En esto para nosotros juegan un papel muy importante las CAAC, que son centros de atención de adicciones del Movimiento Ni Un Pibe Menos por la Droga. Hay que mantenerlos abiertos, con todas las condiciones sanitarias, y que se transformen en el corazón de las iniciativas para el barrio. Desde ahí constituir comités de emergencia en cada barrio con la iglesia, la sala de salud, los directores de las escuelas, los clubes, etc.

Tenemos que exigirle a todos los niveles del estado que destinen los recursos necesarios, y que se convoque a comités de emergencia provincia por provincia y lugar por lugar.

Hay que seguir cómo evoluciona la situación día por día, partiendo de que el centro de esta pelea es de abajo para arriba, no de arriba para abajo. Esa es la única manera que millones sean protagonistas, y entre todos podamos derrotar el coronavirus.

Hoy N° 1807 24/03/2020