El lunes 7 de diciembre, desde Oberá, un grupo de más de 100 compañeras y compañeros de la cosecha de yerba mate intentaron viajar a Posadas para reclamar por compromiso de asistencia incumplidos por el gobierno provincial y más ayuda para afrontar los meses interzafra.
Todos son miembros de la agrupación “Tareferos Justos” fueron impedidos de abordar los colectivos de línea por la policía en la terminal de Oberá, con la excusa de no contar con la aplicación digital que “autoriza” el traslado mediante una autoevaluación. Impedidos por el tiempo de bajarla “perdieron el colectivo”, y la empresa no accedió a devolver los pasajes.
Ante esto decidieron emprender el camino a pie los 95 km hasta Posadas por la ruta y cortando una mano. Fueron obligados a caminar por la banquina y hostigados durante 10 km. Caminaron pese al agobiante calor, en tanto el gobierno rechazó el reclamo que dirigentes de la CCC de Posadas realizaron para abrir una negociación. En un día de agobiante calor caminaron casi 20 km hasta que a las 16 horas recibieron un llamado oficial para esperar un enviado con el fin de negociar el petitorio.
Esta negociación se llevó a cabo y recibieron el compromiso de elevar a 900 unidades la ayuda alimentaria, y otras ayudas de herramientas e insumos para producir aves y huertas en el periodo sin cosecha. Quedó pendiente el bono especial de fin de año de $10.000 que será tratado en sus alcances en los próximos días.
Como señaló el dirigente Hugo Silva de “Tareferos Justos”, acompañado por compañeros de la CCC y el CTA de Oberá, la inflación es grande y no alcanza el pago de la interzafra de $7.000 por mes que solo llega a un grupo menor de compañeros “blanqueados”. Y la mayoría está fuera de ese beneficio, pues exigen a su vez no menos de tres meses de aporte en blanco y se mantiene la incompatibilidad con la Asignación Universal. Increíble “justificativo” que ya lleva años impidiendo paliar la situación de los y las trabajadoras.
A pesar de la existencia del Instituto nacional de la Yerba Mate (INYM) son millones los kilos de yerba verde que se comercializan en “negro” evadiendo y llenando los bolsillos del grupo de los cuatro grandes molineros que monopolizan la producción. Llevamos más de un siglo manteniendo la explotación cercana a la existente en la época de los mensúes, pero estos trabajadores y trabajadoras tienen la gran fuerza adquirida en el trabajo en las difíciles condiciones del yerbal para afrontar los duros desafíos de la lucha por sus derechos.
Corresponsal
Hoy N° 1845 16/12/2020
