Ante el operativo mediático y de desinformación montado por el ministro Randazzo sobre los últimos sucesos y la política ferroviaria los integrantes de SUBI (Somos Usuarios Bien Indignados) reiteramos:
Que a casi año y medio de la masacre de Once y 2 meses de la de Castelar nada ha cambiado en la política ferroviaria.
Siguen haciendo negocios millonarios con los subsidios a las concesionarias mientras los usuarios viajamos en condiciones indignas y con riesgo de vida.
Ante el operativo mediático y de desinformación montado por el ministro Randazzo sobre los últimos sucesos y la política ferroviaria los integrantes de SUBI (Somos Usuarios Bien Indignados) reiteramos:
Que a casi año y medio de la masacre de Once y 2 meses de la de Castelar nada ha cambiado en la política ferroviaria.
Siguen haciendo negocios millonarios con los subsidios a las concesionarias mientras los usuarios viajamos en condiciones indignas y con riesgo de vida.
El gobierno ha abandonado a las víctimas de su política, cientos de usuarios dañados física o psicológicamente suman a los padecimientos diarios que sufrimos todos, las consecuencias de los “accidentes” de Once y Castelar.
Los responsables de la destrucción de los ferrocarriles públicos, tanto empresarios como funcionarios, siguen impunes y enriqueciéndose con dinero del estado.
Y ahora nuevamente el gobierno nacional pretende descargar su responsabilidad sobre los trabajadores que son los que alertaron siempre sobre el vaciamiento y deterioro de los ferrocarriles.
Para que no haya ni un muerto más y podamos viajar dignamente necesitamos recuperar el ferrocarril, que vuelva al Estado pero con el control de usuarios y trabajadores que somos los que lo conocemos, lo usamos, lo necesitamos y lo vamos a cuidar.
Por ello vamos a la marcha a Plaza de Mayo el 23 de agosto. Nos concentramos a las 15 en Once, Constitución y Retiro.
SUBI (Somos Usuarios Bien Indignados)
