El año pasado el gobierno provincial firmó un acta del convenio salarial que contemplaba tres actualizaciones por inflación, cláusula gatillo. Las dos primeras se cumplieron pero en los primeros días del 2020, antes de irse al Caribe de vacaciones, el gobernador Manzur dictó un decreto por el cual derogaba la “cláusula gatillo”. La argumentación que dio antes de irse de vacaciones, muy confusa, hacía aparecer que el responsable era el gobierno nacional, luego no la repitió. Y cuando regresó, frente a los innumerables reclamos, dijo simplemente “la cláusula gatillo no existe”.
Los empleados estatales, en particular, docentes, médicos y municipales protestaron en las calles, la dirigencia sindical se vio obligada a decir algo pero sin llamar a la lucha, los municipales cortaron rutas, los médicos y docentes manifestaban en la ciudad. Finalmente el Gobernador se vio obligado a decir algo y ofreció pagar en negro y en cuotas, o sea, que en la próxima negociación salarial se partirá del salario básico de Setiembre/19, no de enero que es lo que correspondía.
Las bases docentes impusieron el no comienzo de clases el 2 de marzo, Manzur declaró la Conciliación Obligatoria y reiteró la propuesta del pago en negro y cuotas. Los docentes se rebelaron y realizaron el paro. Miles de docentes, con la solidaridad de alumnos y padres llenaron las cuatro cuadras que rodean la Plaza Independencia (que está cerrada por arreglos). Fue emocionante ver adolescentes con su cartel del centro de estudiantes de la Escuela Normal, una cantidad importante de compañeros de la CCC, numerosas docentes con pancartas alusivas, carteles de agrupaciones docentes.
Corresponsal
