Ante la nefasta campaña sobre consumo de drogas llevada adelante por el municipio de Morón en la que aconsejaba conseguir droga de “fuentes confiables” e “ir de a poquito” con la cocaína y las pastillas, se desató un gran debate sobre el problema de las adicciones, con la participación de opinólogos de todos los colores.
En un país como el nuestro, con índices de pobreza según el Indec del 50% de los pibes y pibas menores de 14 años y del 45% entre los 15 a 29 años, con millones que no tienen acceso a la tierra, al techo y al trabajo, ni a la educación, al deporte y la cultura, lanzar una campaña con el centro en la “reducción de daños” es una barbaridad que desconoce, niega o no le importa las condiciones de vida de millones. La droga termina siendo la estación de llegada de un montón de derechos vulnerados previamente.
Desde usinas académicas y despachos estatales, se impulsa la política supuestamente progresista de la llamada “reducción de riesgos y daños”, que parte de la imposibilidad de éxito de la lucha contra la droga y el narcotráfico, y que no tiene en cuenta las condiciones de vida de los y las jóvenes. Enfocan el problema del consumo y las adicciones desde una concepción individual, liberal, del “derecho a consumir”, negando que es un flagelo social.
Hay alrededor de tres millones de pibes y pibas que desde el punto de vista de las clases dominantes son descartables, sobran para sus planes y objetivos. Son pibes que no tienen garantizado ningún derecho básico como el trabajo, la educación o la salud. Y ahí meten la droga como una herramienta de control y adormecimiento de la rebeldía que surge ante semejantes injusticias. Además el narcotráfico se transformó en un fenomenal negocio..
Pero ante esa realidad tan dura a la que los quieren condenar las clases dominantes, miles de pibes y pibas le dan batalla al consumo de drogas y a la política del descarte, organizándose en movimientos como Ni Un Pibe Menos por la Droga, siendo protagonistas todos los días y en todo el país de la lucha política y social, organizando y sosteniendo las CAACs, el comedor, el merendero, el deporte, los talleres culturales, capacitándose para el trabajo, participando en las cooperativas, entre otras muchas iniciativas y actividades.
Corresponsal
Hoy N° 1913 18/05/2022
