Del mismo modo, estuvimos en contra y repudiamos el golpe institucional que derribó al gobierno de Dilma Rousseff. A partir de ahí se implementó una cantidad de medidas antipopulares, de las cuales una de ellas fue la liquidación de los derechos laborales. También quieren liquidar los derechos de la jubilación pero todavía no lo han logrado.
En ese marco se produjo la intervención militar a Río de Janeiro, que reprime básicamente a los habitantes de las favelas y que culminó con el asesinato de Marielle Franco, que es la última de una larga lista de luchadores populares brasileños asesinados en el último año y medio.
Nos oponemos a cualquier proscripción, no solamente a la proscripción electoral de Lula, sino también a otras proscripciones como las de Unidad Popular y otras fuerzas de izquierda, a quienes les exigen requisitos inalcanzables para poder presentarse a elecciones.
Y repudiamos las amenazas de sectores de las Fuerzas Armadas contra el orden constitucional.
Es fundamental la más amplia unidad popular y Latinoamérica para enfrentar las políticas de ajuste y entrega al imperialismo como las que lleva Macri en nuestro país y para avanzar en terminar con todas las formas de explotación y de dependencia.
Partido Comunista Revolucionario