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02 de November de 2016

El jueves 27, científicos y técnicos de diferentes organismos científicos y tecnológicos, y de universidades nacionales, marcharon al Congreso de la Nación en repudio al recorte del Presupuesto de 2017.

No al recorte en ciencia y tecnología

Acto en el Congreso de la Nación

 
Organismos de ciencia y tecnología, y varias universidades nacionales, se movilizaron el jueves 27 frente al Congreso de la Nación, para denunciar el recorte de fondos expresado en el Proyecto de Ley de Presupuesto 2017, que afectan al funcionamiento de la gran mayoría de los organismos: INTA, INTI, Inidep, CNEA, Conae, Conicet, así como a universidades.

 
Organismos de ciencia y tecnología, y varias universidades nacionales, se movilizaron el jueves 27 frente al Congreso de la Nación, para denunciar el recorte de fondos expresado en el Proyecto de Ley de Presupuesto 2017, que afectan al funcionamiento de la gran mayoría de los organismos: INTA, INTI, Inidep, CNEA, Conae, Conicet, así como a universidades.
Durante la jornada que convocó a miles de estudiantes, investigadores y científicos se denunció como un atropello a la educación y al desarrollo científico el recorte del gobierno de Macri. 
Convocado por la FUBA, Jóvenes Científicos Precarizados, la AGD UBA, Cecen, Conadu Histórica; ATE-Conicet; ATE-CNEA; Aduba, CyTA, entre otros, la jornada –muy divulgada por las redes sociales- se hizo sentir pero sobre todo en las adyacencias del Congreso, con jóvenes que portaban carteles en los que divulgaban sus proyectos y en qué afecta a nuestro país la medida presupuestaria a la comunidad científica y tecnológica.
Desde el Grupo de Gestión Política de Estado en Ciencia y Tecnología denuncian: “El gobierno propuso incrementar el presupuesto para el sector entre 700 y 900 millones de pesos. Este monto es claramente insuficiente cuando se necesitarían, por lo menos, 10.000 millones de pesos sólo para mantener la pauta de crecimiento comprometida en el marco del Plan Argentina Innovadora 2020 y la sustentabilidad de los organismos de ciencia y tecnología. 
Denuncian además que la propuesta del gobierno nacional “es un camino hacia la desarticulación del sector de ciencia y tecnología, con todo lo que eso significa. Además, esto sucede a pesar de que el Gobierno ha contraído durante 2016 una deuda por 40.000 millones de dólares -y se prevé una suma similar para 2017- que no son destinados a fortalecer la infraestructura o proyectos que permitan devolver esos préstamos, sino para financiar el déficit fiscal y gastos corrientes en pesos. “Por otro lado, poco se habla que de esos dólares ingresados, alrededor de 10.000 millones de dólares ya se fueron como fuga de capitales. Esto es 15 veces más que lo necesario para sostener el complejo científico y tecnológico, sin contar las universidades”.
 
Por la continuidad de los programas de investigación
Compañeros de ATE, del Centro Atómico de Bariloche, en un contundente documento denuncian que la decisión del actual gobierno “repercute negativamente en las tareas que realizamos tanto en CNEA como en Conicet. El presupuesto actual es menor que cualquier medición de la inflación, incluso la del propio gobierno. Este recorte no sólo afectará los salarios, sino que pone en riesgo a los diferentes proyectos que se están realizando. Muchos de estos proyectos son de carácter estratégico y están directamente relacionados con la capacidad de construir un estado soberano. Además la gran mayoría de los proyectos de ciencia y tecnología repercuten en el tejido productivo, ya que requieren a la sociedad insumos con alto grado de integración y trabajadores calificados estimulando el desarrollo industrial del país y generando puestos de trabajo. Por eso decimos que no son sólo nuestros trabajos y proyectos los que están en juego, sino nuestra soberanía y la posibilidad de avanzar hacia una sociedad mejor”.
Además, denuncian la falacia de la austeridad: “mientras que el aumento del presupuesto nacional total presentado para 2017 es del 50%, en todos los organismos de CyT el aumento es menor a ese monto, incluso hay organismos para los cuales el presupuesto nominal, sin ajuste de inflación y medido en pesos, es todavía menor que el de 2016, como son los casos de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (ANPCyT) y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CNAE), cuyos presupuestos disminuyen 32% y 6% respectivamente. (…) Por otro lado el gobierno nacional quitó retenciones a la soja y a la minería, y actualmente está por bajar los impuesto a la carne de exportación. De esta manera favorece a las actividades primarias en manos de unos pocos capitales concentrados, quitando fondos que podrían utilizarse para industria, CyT, y actividades que desarrollan la densidad y extensión del mercado laboral”.
Cabe destacar que en esta pelea, la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (FCEN) de la UBA está haciendo circular un documento “Defendamos la Ciencia Argentina” para elevar a los diputados y senadores Nacionales con el objetivo de garantizar la continuidad de los programas de investigación científica y tecnológica y ya ha recibido alrededor de 32.000 adhesiones.