El pasado miércoles 27/7 se realizó un exitoso paro en 23 hospitales de la ciudad de Buenos Aires y en el Hospital Posadas. El paro fue convocado por ATE-Capital, la Asociación Profesionales y ATE del Garrahan, la Asociación de Profesionales del Posadas, y la filial de AMM, la Asociación de Profesionales, los residentes y ATE del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez de la Capital Federal.
El pasado miércoles 27/7 se realizó un exitoso paro en 23 hospitales de la ciudad de Buenos Aires y en el Hospital Posadas. El paro fue convocado por ATE-Capital, la Asociación Profesionales y ATE del Garrahan, la Asociación de Profesionales del Posadas, y la filial de AMM, la Asociación de Profesionales, los residentes y ATE del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez de la Capital Federal.
Entre los reclamos se expresaron los puntos en común y también las particularidades de cada hospital. Algunos de los reclamos comunes son: el 82% móvil, aumento salarial del 40%, la denuncia del vaciamiento hospitalario, asignación inmediata de los recursos humanos necesarios, salario de residentes igual a la categoría inicial de ingreso a planta, reintegro de los descuentos y cese de la persecución a los trabajadores. Los trabajadores de estos hospitales vienen realizando reuniones de coordinación, han difundido comunicados de prensa en común y realizado conferencias de prensa conjuntas.
Al cierre de esta edición (2/8) se realizaba un nuevo plenario general de ATE Capital para continuar con las medidas. En la asamblea del Hospital Gutiérrez del miércoles 27/7 se debatió ampliamente los pasos a seguir. Se votó por mayoría realizar un nuevo paro el 16/8. En la asamblea, el grupo vinculado a Filmus y Tomada intentó infructuosamente impedir la coordinación que viene avanzando entre los trabajadores de los hospitales porteños y el Posadas. En cambio, se votó por amplia mayoría concurrir al plenario de ATE del 2/8, donde también participa la Asociación profesional de los hospitales Posadas y Garrahan.
La respuesta del gobierno de Macri ante los paros fue mandar numerosos inspectores para auditar a los trabajadores, dando así un paso más en la persecución política.
Luego de la asamblea se realizó un acto en la puerta del Hospital Gutiérrez con delegaciones de numerosos hospitales y una gran cantidad de adhesiones. La carpa blanca permaneció hasta altas horas de la noche. Se recolectaron más de 500 firmas de madres y familiares de los niños. Ante los aprietes, la respuesta fue más unidad de los trabajadores: la única garantía para la salud pública que merece el pueblo.
