Desde la Federación Nacional Campesina y desde el Movimiento de Naciones y Pueblos Originarios en Lucha del Chaco, repudiamos el brutal desalojo y ataque sufrido por las comunidades campesinas y originarias de Santiago del Estero en el paraje Suncho Corral, donde se encuentra en peligro la vida del campesino Héctor Reyes Corvalán internado en terapia intensiva, herido de balas de goma y con graves quemaduras en todo el cuerpo, al ser incendiada su vivienda en el desalojo de sus tierras.
Corvalán está en conflicto por la posesión de 270 hectáreas con el terrateniente cordobés Néstor Quesada, quien junto con la policía realizaron este acto criminal intentando tomar posesión del lote habitado por la familia campesina.
Hacemos responsable al gobierno de Santiago del Estero, a la jueza María Cecilia Paskevicius quien dio la orden de desalojo, al personal policial y al terrateniente Néstor Quesada por los graves hechos sucedidos.
Nos solidarizamos con el Movimiento Campesino de Santiago del Estero y la familia Corvalán, y estamos en alerta para defender unidos los derechos de los pueblos campesinos e indígenas de la Argentina, en momentos donde en todo el país tanto desde gobiernos provinciales y desde el gobierno nacional profundizan su política de apoderarse de las tierras y de los territorios de las comunidades campesinas e indígenas a favor de los terratenientes y sus negocios.
Basta de desalojos y represión a las comunidades campesinas originarias.
Tierra y territorio para vivir.
Federación Nacional Campesina.
Movimiento de Naciones y Pueblos Originarios en lucha Chaco
Hoy N° 1739 17/10/2018