Con la presencia del compañero Rubén Portas de la Mesa Nacional, en el plenario se discutió la política represiva del gobierno y el intento de destruir la CCC mediante la represión y la negativa de creación de trabajo; en una provincia donde ha aumentado la desocupación, el hambre y han muerto niños inscriptos en el programa oficial “Hambre Cero”, justamente por hambre.
Con la presencia del compañero Rubén Portas de la Mesa Nacional, en el plenario se discutió la política represiva del gobierno y el intento de destruir la CCC mediante la represión y la negativa de creación de trabajo; en una provincia donde ha aumentado la desocupación, el hambre y han muerto niños inscriptos en el programa oficial “Hambre Cero”, justamente por hambre.
Se avanzó en la discusión interna de varios puntos para avanzar en la unidad, la lucha y el crecimiento de la CCC. Se analizó que: A) Existe en algunos compañeros la idea de que la CCC es una especie de empresa donde se consiguen cosas, entre ellas puestos de trabajo. Que los delegados o dirigentes son como “patrones” o “punteros” que manejan la plata y distribuyen lo que se consigue, a veces entre sus “amigos” o familiares”. B) ¡Cuanto menos somos, más para repartir!, C) el delegado es el que tiene que decidir las cosas, el que tiene el poder, D) no es necesario aportar dinero para sostener a la organización, E) ¿Cómo se toman las decisiones en el cuerpo de delegados? ¿Tiene el mismo peso el voto de un delegado que representa a 10 personas que uno que representa a 100?
Estos puntos así como el plan de lucha fueron motivo de fuerte debate en las ocho comisiones en que se dividió el Plenario. La discusión de cómo se seleccionan a los compañeros y compañeras para el trabajo, la necesidad de democratizar el cuerpo de delegados y los barrios para evitar el manejo de tipo “puntero” o “caudillo” que decide por el conjunto fue expresada en el plenario final. En el mismo se dio lectura a las conclusiones de todas las comisiones y se pasó a discutir los puntos principales.
Se tomaron algunas decisiones como la división por períodos del trabajo en veredas, para que más compañeros se beneficien y aumentar la fuerza para pelear, ante la mezquindad del gobierno. Se aprobaron los aportes a la organización provincial y nacional y se decidió mantener la lucha para torcer el brazo al gobierno en la suba del boleto de colectivo y por la obtención de más puestos de trabajo y mayor continuidad.
El compañero Rubén Portas realizó aportes importantes en los puntos en discusión y en cuanto a los objetivos de la CCC y los principios democráticos que impulsan a la organización, y los intentos permanentes de los gobiernos por dividirnos.
Como resultado de las luchas acaecidas hasta la presente publicación se ha logrado frenar al aumento del boleto de colectivo que se pretendía llevar a $2,40, quedando el mismo en $1,60 ($0.20 de aumento). No es un triunfo completo pero se consiguió con la unidad de todos los sectores sociales, estudiantes y partidos políticos, la lucha continúa.