Vecinos del barrio Costanera, de la Ciudad de San Miguel de Tucumán convocan a una marcha-procesión, por las calles y pasillos del Barrio, para el 7 de abril.
Vecinos del barrio Costanera, de la Ciudad de San Miguel de Tucumán convocan a una marcha-procesión, por las calles y pasillos del Barrio, para el 7 de abril.
Desde el año 2014 el gobierno nacional y provincial se comprometieron en la construcción de un Centro Preventivo Local de Adicciones (Cepla) para atender la demanda de políticas públicas no sólo de prevención sino además en asistencia para la salud de las personas en situación de consumo de sustancia psicoactivas.
Asistir a jóvenes en situación de consumo de paco es una demanda histórica por la cual vienen luchando las Madres del Pañuelo negro, el grupo Ganas de vivir, referentes del barrio y vecinos que, además pertenecen a un colectivo de siete barrios en emergencia por las problemáticas de las adicciones llamado Hermandad de los Barrios Contra las Drogas.
El edificio se comenzó a construir a mediados del año 2015. Ni el gobierno nacional ni el provincial se hacen cargo de la finalización del mismo dejándolo abandonado a merced de los acontecimientos temporales y sociales.
La política de Mauricio Macri de “la revolución de la alegría” pasó a ser la política de la alegría de los narcos. El blanqueo de capitales (el mayor en la historia argentina y el más grande del mundo con el gobierno de Macri, según la BBC) no hizo otra cosa que hacer crecer el ingreso económico de Estado argentino, con plata que proviene de la comercialización de drogas, armas y trata de personas. Lo que lleva a deducir que al narcotráfico le está yendo bien con la política macrista. Mientras a los jóvenes de los sectores populares se los hunde en la pobreza de las drogas condenándolos a deambular por las noches y días, bajo la lluvia o el sol, sin calzados, y desabrigados, con hambre y sin tener un lugar en el barrio donde lo asistan.
Vecinos, jóvenes del grupo Ganas de Vivir y equipos de profesionales, etc., tendrán que hacer funcionar el comedor para personas en situación de consumo en el edificio abandonado, y a la intemperie, porque no cuentan con un espacio físico para contener a los jóvenes.
Tanto el gobierno de Macri como el de Manzur se tiran la pelotita de a quién le corresponde construir el Cepla. Y la comunidad realiza la marcha-procesión para exigir la construcción inmediata del establecimiento que será para la salud del barrio Costanera.
