El Comité Central avanzó en el análisis de los cambios que se van produciendo de la situación política internacional y nacional. Donde el triunfo de Donald Trump profundiza la disputa interimperialista, agrava las desigualdades y avanzan los factores de guerra, que soplan las potencias imperialistas en su creciente disputa.
El Comité Central avanzó en el análisis de los cambios que se van produciendo de la situación política internacional y nacional. Donde el triunfo de Donald Trump profundiza la disputa interimperialista, agrava las desigualdades y avanzan los factores de guerra, que soplan las potencias imperialistas en su creciente disputa.
Millones de refugiados deambulan por Europa y Asia siendo tratados poco menos como animales, avanzan posiciones fascistas y xenófobas. Frente a estos brutales sufrimientos que muestran la verdadera cara de los imperialistas y sus socios nativos crece la rebeldía de los pueblos con luchas y movilizaciones como se ven en EEUU contra la política fascista de Trump, las grandes luchas obreras que recorren China, las movilizaciones populares en Europa y América latina.
En nuestro país, el gobierno de Macri es un gobierno de ricos para ricos, de dueños y gerentes de monopolios y latifundios como él. Con esta política se profundiza el hambre y la entrega nacional hasta límites insoportables para nuestro pueblo.
Frente a esta política el pueblo argentino no ha dejado de luchar un solo día. La clase obrera ocupada lucha por paritarias y para enfrentar la oleada de despidos y suspensiones buscando empujar desde abajo el ya imprescindible paro nacional. Los desocupados no han abandonado un solo día las calles, y con la unidad alcanzada por la CCC, CTEP y Barrios de Pie han obtenido un gran triunfo político y reivindicativo con la Ley de Emergencia Social. Triunfo que para su implementación habrá que garantizar también desde las calles.
Su principal aliado, el campesinado, está en pie de lucha como lo demuestra el crecimiento de la FNC, que acaba de realizar una exitosa mesa nacional en la provincia de Salta y que viene protagonizando grandes luchas en el Chaco, La Plata, Corrientes, Mendoza y junto a los pueblos originarios en la gran jornada nacional de las economías regionales del 4 de noviembre. Las grandes luchas de los yerbateros en Misiones, de la fruta en Rio Negro y de todas las economías regionales.
La lucha de las mujeres, con un nuevo hito como fue el extraordinario Encuentro Nacional de Mujeres de Rosario, recorre las calles de la Argentina con jornadas multitudinarias, donde se prepara el paro del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer trabajadora. Los estudiantes, los jubilados, los vecinos de los barrios salen cada día a enfrentar la prepotencia de la política de Macri con movilizaciones, cortes de ruta, tomas de comisarías, etc.
Estamos en momentos donde miles de luchas grandes y pequeñas, conocidas algunas y ocultadas muchas, recorren a lo largo y a lo ancho nuestra patria.
Hemos tenido aciertos de línea importantes y hemos estado a la cabeza de grandes luchas. Venimos avanzado en la pelea por las personerías electorales. Los partidos que conforman el Frente Popular vienen dando pasos abriendo conversaciones en distintas provincias. Es necesario avanzar en un amplio reagrupamiento de fuerzas, tanto para las tormentas sociales y políticas, como para las elecciones del 2017.
Al calor de esto es necesario avanzar en el crecimiento del Partido y su Juventud. Por eso el Comité Central de enero lanzó esta campaña de afiliación al PCR hacia el 50 aniversario de su fundación. Una campaña que signifique un gran salto en las fuerzas del Partido y nos ponga en mejores condiciones para las grandes tormentas que se avecinan.
El primer paso, indispensable para dar esta batalla, es que los Comités de zona discutan la campaña, y hagan su proclamación. La experiencia muestra que las claves para que una campaña tenga éxito son la discusión colectiva, la planificación y el control. Por eso que cada comité de zona discuta la campaña al calor de los objetivos políticos de cada lugar es el primer paso para ganar al conjunto del Partido y la Juventud.
Hace 49 años nacimos con un objetivo grande, la lucha por el poder. Ese es el objetivo, y en esa pelea se inscribe esta campaña de afiliación. Nuestra participación en las luchas, en las elecciones, y el crecimiento del Partido y su Juventud, arraigando entre las masas, tiene que servir en esa dirección.
