Noticias

02 de October de 2010

El 30 de abril se llevó cabo el juicio para sacarle la estabilidad laboral y por despido, iniciado por Kraft, contra Ramón Bogado, coordinador de la Comisión Interna que dirigió la lucha del 2009.

Redoblar la campaña para impedir el despido de Bogado

Hoy 1316 / El fallo saldrá en los próximos días

Este juicio es parte de la ofensiva que lanzó la Kraft el 18 de agosto del año pasado, cuando despidió 162 trabajadores. A Bogado y el resto de los miembros de la Comisión Interna, la patronal debió iniciarles estas causas, por tener fueros gremiales.
Gran cantidad de compañeros estuvieron junto a Ramón Bogado durante la jornada, particularmente trabajadores de Kraft y nutridas delegaciones de la CCC de distintos puntos de la Capital Federal y Gran Buenos Aires.
En los días previos se entregó en los Tribunales cerca de 2.000 firmas de legisladores nacionales, y dirigentes de distintos sectores sindicales, sociales, de derechos humanos, religiosos, políticos, etc., reclamando que se rechace la pretensión de la empresa.
Entre los presentes se encontraban Gerardo Robbiano (Comisión Interna de los trabajadores de la ex Bosch), Victorio Paulón, Comisión Directiva Nacional de la Central de Trabajadores Argentinos; Pablo Masciángelo, Sec. Interior CTA Prov. de Buenos Aires; un representante del consejo directivo provincial de Suteba; Vilma Ripoll, por el MST; Alfredo Cáceres de Opinión Socialista; Gustavo Funes y Leandro Segovia por el PCR; Nelba Salazar del MIJP; Liliana Ríos CCC Zona Norte; la presidenta del Centro de Estudiantes de Arquitectura de la UBA, y una concejal de Tigre. También estaban compañeros de la Asamblea de Becar y la Agrupación Fora.
 
El juicio
Como no podía ser de otra manera, los testigos presentados por la empresa (gerentes y personal directivo) intentaron minimizar el reclamo de los trabajadores durante la epidemia de gripe A, cuando, particularmente las trabajadoras madres de familia con hijos en la guardería de la fábrica, pedían medidas de higiene, y que se le paguen los jornales caídos de los días que no podían presentarse a trabajar debido a que se cerró la guardería.
Esta empresa, primer monopolio de la alimentación en EEUU, y segundo en el mundo, sólo ofreció un subsidio de $ 200 a las compañeras, y como quedó claro en la audiencia, los jornales de esos días fueron abonados ¡por el gremio! El veredicto del Tribunal se conocerá dentro de 7 a 10 días.
 El compañero Bogado, a la salida del juicio, ratificó la justeza de los reclamos, y agradeció la presencia de todos: “La Kraft busca despedirnos por haber enfrentado en una lucha heroica, los despidos, lo que queda desteñido en este juicio. La patronal no pudo desmentir que la nuestra fue una lucha de todos”, afirmó Bogado. Denunció la superexplotación en la fábrica y la política del gobierno, “que cuando vas a pelear contra estos monopolios, salen a favor de los poderosos”. “No somos dirigentes vendidos, no nos vendemos al Estado, no nos vendemos a la Kraft, porque estamos con todos los compañeros en la lucha permanente por salarios, por los cuerpos de delegados. No estamos dispuestos a pagar la crisis que quieren descargar sobre nosotros”, dijo Bogado, reivindicando el camino de la lucha.
 
La persecución sigue
 El viernes 7, Ramón Bogado deberá enfrentar un juicio contravencional en la Capital Federal, por un corte de calle frente al Ministerio de Trabajo, con el que el gobierno de Macri se suma a esta campaña persecutoria. El 14 de mayo, será el turno del juicio por el retiro de la tutela sindical al compañero Jorge Penayo, otro integrante de la Comisión Interna que dirigió la lucha del año pasado.
 Además, Kraft abrió durante el conflicto 16 causas penales contra Bogado y Jorge Penayo, 12 causas a María Rosario, y 8 contra Arcadio Alfonso. Algunas de estas causas son por doble coacción, usurpación, turbación de la posesión, amenazas, atentado y resistencia a la autoridad, daños y lesiones, que son delitos con pena de cárcel. En su revanchismo también armó causas penales a trabajadores despedidos, familiares y compañeros que fueron solidarios con esta lucha.
 Por todo esto debemos redoblar la campaña por el rechazo a la pretensión de la Kraft, de despedir a los compañeros que dirigieron el conflicto del año pasado.
 Porque esta lucha plantó la semilla de la gran rebelión que se está dando en los trabajadores de la alimentación en su reclamo de aumento salarial, cuya mayor expresión son los paros en las plantas de Arcor Córdoba.