Luego de las vacaciones de invierno en varias provincias no se reiniciaron las clases por paros de los trabajadores docentes, que exigen aguinaldos atrasados y aumento de sueldo. El gobierno nacional ya no tiene caja suficiente para salvar el déficit de los estados provinciales, situación de dependencia que ha causado la misma política kirchnerista, y son pocas las provincias que no tienen las cuentas en rojo. San Juan es una de las excepciones, ya que el gobierno dice tener las cuentas equilibradas y puede pagar los salarios de los trabajadores estatales en fecha y ya completó todo el aguinaldo.
Frente a esta situación algunos voceros del gobierno, como el diputado nacional Daniel Tomas y medios de comunicación adictos a la pauta oficial, salieron a explicar y argumentar con falsedades que vivimos esta realidad gracias a la actividad minera que el giojismo impuso en la provincia, y lo contrapone con Mendoza, que rechazó la gran minería y hoy tiene problemas financieros.
Para dilucidar la mentira que Daniel Tomas propone hacer pasar por la cabeza de los sanjuaninos, la mejor manera es contrastar los datos reales. En números redondos, este año el presupuesto proyectado para San Juan es de alrededor de 8.000 millones de pesos, eso es lo que va a gastar el gobierno en hacer funcionar todas las áreas. Para cubrir ese presupuesto también ha proyectado sus ingresos, y el mismo gobierno ha calculado que la provincia puede recaudar 1.200 millones de pesos con impuestos y contribuciones provinciales. El resto, 6.800 millones, vendrían de la coparticipación federal de impuestos que provienen del IVA, impuesto a la Ganancia y otros rubros al que aportan las 24 provincias argentinas y redistribuye el Estado nacional, además de las ‘limosnas’ que éste otorga a las provincias que acatan las decisiones políticas nacionales. Por lo tanto los recursos propios del Estado sanjuanino son menos de una sexta parte de lo que va a gastar.
De esa sexta parte del presupuesto (1.200 millones) una porción minúscula la aportan las empresas de servicios mineros, en su mayoría de patrones sanjuaninos, que pagan ingresos brutos (pero no Barrick, Yamana o Xtrata), el resto, para completar los 1.200 millones, lo pagan todos los sanjuaninos con su actividades productivas, en la boleta de la luz, en sus compras en los comercios, las industrias sin promoción, etc. Por lo tanto es evidente que “la minería” no resuelve ni el 5% de los gastos del Estado, por lo que la prédica de los pro Barrick, como Daniel Tomas, no son más que falsedades que se propalan para justificar el saqueo escandaloso de nuestros recursos naturales por monopolios que juntan dinero a paladas y no aportan ni para comprar una aspirina en los hospitales.
Pero todavía queda aclarar por qué San Juan no tiene déficit. La explicación es muy sencilla, luego de 9 años de gobierno de Gioja, con la complicidad de dirigentes gremiales traidores y otros incompetentes, San Juan tiene los empleados estatales, incluidos docentes, administración pública, salud y policía, con los peores salarios del país.
La administración central funciona con un fraude laboral que se llama ‘contrato’, por el cual miles de empleados estatales son considerados prestadores de servicios. Desde hace 4 años Gioja amaga con pasarlos a planta permanente pero hasta la fecha no pasa nada, y todo hace prever que va a jugar con la jubilación de la planta permanente para recién producir el ingreso de nuevos empleados con derechos.
En 9 años de gobierno de Gioja, el Estado provincial no ejecutó ninguna obra importante con fondos propios; todos proviene de la caja nacional, y el mantenimiento de los edificios ya existentes es un agujero negro en la gestión giojista. Así las escuelas y centros de salud se caen a pedazos, tienen problemas eléctricos y les falta calefacción, etc.
Desde hace 9 años que no hay programas provinciales en ningún área de gobierno. La ayuda para los desocupados y familias necesitadas dependen de la buena relación del ministro de Desarrollo Humano con su par nacional, Alicia Kirchner, quien hoy está abocada a su campaña en la provincia de Buenos Aires y por eso absorbe la mayoría de los recursos para desbancar a Scioli. En San Juan las mejoras educativas dependen de los fondos nacionales, las actividades recreativas dependen de los fondos nacionales, los subsidios para los deportes dependen de los fondos nacionales, los planes de prevención de la violencia de género dependen de los fondos nacionales, las viviendas dependen de programas nacionales, y así se podría seguir un rato largo. Por eso es que San Juan no tiene déficit, porque cuando se trata de las necesidades del pueblo Gioja gasta lo mínimo indispensable, ajusta en el salario de los trabajadores y no hace inversiones más que para ayudar algún empresario exportador amigo.
Pero la culpa no la tiene sólo el ‘chancho’, dice el dicho popular, la dirigencia gremial de los trabajadores estatales y privados también es responsable de esta situación. Durante años muchos dirigentes transformaron sus gremios en mutuales, y luego pasaron a ser verdaderas empresas privadas que esquilman a los trabajadores por dos costados, con créditos y con el achatamiento salarial. El principal exponente de esta práctica es “Pepe” Villa de UPCN, seguido de Chica de Luz y Fuerza, y Ávila de Comercio. ATE no ha entrado en esta variante pero a su vez ha sido impotente a la hora de movilizar a los trabajadores a la lucha.
El pueblo sufre
Mientras el giojismo se vanagloria de sus políticas, el pueblo trabajador sufre necesidades. La actividad minera ha dado trabajo y sueldos aceptables para un contingente reducido de sanjuaninos, pero no alcanza a cubrir la demanda de empleo que existe, sobre todo en la época invernal en que disminuye la sus actividades agrícola y la propia minería. Los productores viñateros chicos ya casi han abandonado sus fincas por la falta de rentabilidad y perspectiva de conseguir revertir la situación.
Muchas fábricas comienzan a sentir la crisis y buscan evitar las pérdidas disminuyendo mano de obra. Por ejemplo TCA (cables para Peugeot) redujo a muchos obreros a media jornada, hay camioneros cesantes en Veladero, en la Fábrica de Plástico trabajan 3 de los 5 días de la semana y en la de Vidrio hay trabajadores cesantes por 25 días. En muchos sectores todavía no se hizo efectivo el pago de aguinaldos.
La inflación está desbocada y como lo demuestran mes a mes las compañeras de Amas de Casa del País, los verdaderos números difieren completamente de los índices truchos que publica el Indek, utilizado por el gobierno para no aumentar salarios mientras continua el ajuste encubierto, recaudando cada vez más del 21% de IVA que pagamos todos hasta en 1 kg de pan, de carne o de fruta.
La desocupación y sub ocupación avanza. Son muchos los que tienen que recurrir a trabajos precarios en negro y changas. Los vendedores ambulantes además del constante hostigamiento por parte de la Municipalidad de la Capital, sufren las mermas en las ventas viendo perjudicado su único sostén del día a día. Volvió a verse gente revolviendo basura en los barrios más cercanos al centro.
El tema de vivienda se agudiza y a 1 año de la muerte de los 4 compañeros de Libertador en Jujuy, la respuesta del gobierno ante tan sensible problema sigue siendo la represión. Como ocurrió con los compañeros que tomaron los terrenos en Benavides y Grecco, familias que necesitan viviendas y ni por cerca entran en los requisitos de los préstamos del Banco Hipotecario que propone Cristina con dinero de la Anses.
Hay un giro represivo en la política giojista, quien ha cambiado la plana mayor de la policía para poner a comisarios acostumbrados a tratar con delincuentes y no con organizaciones sociales. Así engañaron a los ocupantes de los terrenos con una promesa de audiencia del gobierno provincial, que nunca se efectuó por lo que decidieron continuar con la toma y fueron reprimidos fuertemente por la policía, encarcelando a uno de los compañeros de nuestra organización.
El descontento todavía no es desbordante para Gioja y Cristina, pero crece día a día. Esto crea condiciones favorables para quienes queremos unir al pueblo en la lucha por un proyecto distinto. El panorama político está removido por rumores de divisiones dentro del Frente para la Victoria, y las proyecciones para las elecciones del 2013.
El PCR está a toda máquina con su colecta financiera anual, con actividades en muchos barrios, pintadas, volanteadas y afiliaciones al PTP, y ha planificado un gran cierre para el 7 de agosto (al cierre de esta edición) con una charla.
