Esta semana, con asambleas el martes 18 y miércoles 19 con cese de actividades en las últimas tres horas de atención al público, los bancarios continuamos con el plan de lucha que iniciamos hace un mes en reclamo de reapertura de paritarias, contra el impuesto a las ganancias y en defensa de la banca pública. De no haber respuestas a estos reclamos, el viernes 28 de octubre habrá un paro general bancario de 24 horas.
Esta semana, con asambleas el martes 18 y miércoles 19 con cese de actividades en las últimas tres horas de atención al público, los bancarios continuamos con el plan de lucha que iniciamos hace un mes en reclamo de reapertura de paritarias, contra el impuesto a las ganancias y en defensa de la banca pública. De no haber respuestas a estos reclamos, el viernes 28 de octubre habrá un paro general bancario de 24 horas.
La inflación anual estimada para el 2016 supera el 42%. Nuestro acuerdo salarial firmado en abril fue del 33%, con lo cual la pérdida real de poder adquisitivo real supera el 10% para este periodo, por eso estamos reclamando la reapertura de las paritarias.
Esta cláusula de revisión que fue contemplada en al acta acuerdo ante posibles variaciones significativas de la economía, es la que estamos peleando hacer valer a pesar de la negativa del gobierno.
Por otra parte, el peso del impuesto a las ganancias se vuelve a sentir con fuerza, además de los 20.000 bancarios que se incorporaron a pagar que estaban exentos, la suba del mínimo no imponible fue totalmente insuficiente. Esto genera mucha bronca sobre todo en muchos compañeros que votaron a Macri por su promesa de campaña de eliminar el impuesto a las ganancias a los trabajadores.
La asociación bancaria y el actual secretario general del gremio Sergio Palazzo adoptaron un perfil decididamente opositor a las políticas del actual gobierno desde un comienzo. Los 65 días de acampe contra los despidos en el Banco Central y los paros en el Banco Provincia frente al avance privatizador, pusieron a todo el gremio en estado de alerta y movilización frente a las actuales políticas.
La bancaria participó activamente de la movilización del 29/4 junto a las cinco centrales sindicales, en la marcha del 7/8 junto a las organizaciones sociales, y el 2/9 en la marcha federal. También jugó un rol activo en la unificación de la CGT y en la exigencia de que se convoque a un paro general, y ante la falta de definiciones junto a los gremios que conforman la CFT (Corriente Federal de Trabajadores) se retiró del Congreso.
La marcha federal del gremio que se realizó el 22 de septiembre volvió a sacar a la calle a nuestro gremio: más de 5.000 bancarios de todo el país nos movilizamos por el microcentro, y fue el arranque de este nuevo plan de lucha.
En las asambleas hay un gran debate sobre la situación, hay incertidumbre en cuanto a las perspectivas políticas y económicas. Frente a las voces que reivindican al gobierno K, surge el rechazo de gran parte de los compañeros que no quieren volver atrás asqueados de la corrupción y la mentira que quedó al descubierto.
Es por esto clave profundizar la discusión en las asambleas y pelear por el protagonismo de hasta el último de los compañeros, para unir al conjunto de los trabajadores y hacer retroceder al actual gobierno como lo venimos haciendo hasta ahora.
