El jueves 3 de septiembre, luego de varias movilizaciones y asambleas que vienen llevando adelante, diferentes sectores del campo entrerriano -afectados por la falta de políticas públicas adecuadas para paliar la crisis que se viene profundizando día a día-, centenares de productores confluyeron desde diferentes puntos de la provincia.
El jueves 3 de septiembre, luego de varias movilizaciones y asambleas que vienen llevando adelante, diferentes sectores del campo entrerriano -afectados por la falta de políticas públicas adecuadas para paliar la crisis que se viene profundizando día a día-, centenares de productores confluyeron desde diferentes puntos de la provincia.
El tractorazo fue convocado por un comité de crisis, constituido por varias organizaciones y formado al efecto de llevar diversos planteos y problemas ante el gobierno. Desembocaron así en una dura jornada, cansados de las dilaciones y falta de respuestas por parte del gobierno de Urribarri y el gobierno nacional.
La parte más combativa perteneciente a FAA y sectores autoconvocados encabezaron con sus tractores la marcha desde el Túnel y, prácticamente, cerraron la entrada principal de Casa de Gobierno, donde hubo forcejeos.
Luego de una larga espera del gobernador, que como siempre está ausente cuando llegan manifestantes, nerviosos, cansados y desahuciados pretendieron entrar y hubo gases, respondidos con huesos cabezas de vacas que habían llevado como muestra del estado de crisis terminal en que se encuentran una gran parte de los manifestantes. Sumados a dirigentes de CRA, Bolsa de Cereales, Colegio de Ingenieros Agrónomos, ACA, Cámara Argentina de Productores Integrados de Pollo, Cámara de Productores Lecheros de Entre Ríos, Cámara de Productores Porcinos de Entre Ríos, Centro de Acopiadores de Granos de Entre Ríos, Cooperativas Agropecuarias Federadas de Entre Ríos, Federación Agraria Argentina, Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos, Federación de Cooperativas Arroceras Argentinas, Federación Entrerriana de Cooperativas, Federación Entrerriana de Transporte Automotor de Cargas, Sociedad Rural Argentina.
El gobierno ofreció una parte mínima en créditos subsidiados y gestiones ante YPF para otorgar préstamo de gasoil para cosecha. Bajar algún punto de impuestos y aumentar el mínimo para el pago de Ingresos Brutos. Pero no se acercan a los montos requeridos para un parcial salvataje (que iría en parte a las cooperativas) de 2.000 millones, que se pide por parte de los productores para poder volver a sembrar.
Y así la siembra de trigo producto de los bajos precios, se ha reducido este año un 30 % como mínimo y la de maíz se estima disminuirá aún más. Como así también la de soja. Pero quedan afuera de las respuestas, soluciones para los pequeños y medianos citricultores, con un mercado interno saturado por la caída de las exportaciones, que reciben precios irrisorios de 30 a 40 centavos el kilo mientras al consumidor no bajan de 7 u 8 pesos el Kg; tamberos, a quienes empresas como La Sibila (Boglione, ex Nestlé de Nogoyá) les recorta los 35 centavos que el gobierno otorga por tres meses más, anulando así el pijotero estímulo del subsidio oficial; algodoneros, con un flete de 500 Km (para venderlo en Corrientes, ante la falta de una desmotadora en la provincia), anula la ganancia del productor.
Las propuestas para los más pequeños y medianos
Si bien se han planteado propuestas, están bastante soslayadas dentro del paquete de las negociaciones. El gobierno insiste que después de algunas medidas pequeñas y parciales (baja de algún punto en los impuestos y algún crédito para compra de comestible) seguirán gestionado por ellas.
Pero los productores ya saben cómo son estas gestiones que siempre terminan beneficiando a los más amigos: como sucedió con las movilizaciones de los sectores y trabajadores citrícolas que, dicho sea de paso, no llegaron los 30 millones anunciados; con los fondos para invernáculos a pequeños citricultores; con el subsidio de 30 centavos por litro de leche que no ha llegado aún a Entre Ríos; con los 3 años de atraso del ministro Shunk en gestionar los Fondos Nacionales del Algodón; con las maniobras en la comercialización, precio del trigo y maíz y los mecanismos corruptos de la exportación, donde siguen ganando los de siempre, los amigos exportadores del kichnerismo.
Por eso sigue siendo necesario e imprescindible la organización independiente con la fuerza propia de los más chicos y medianos, para que los resultados de tantos esfuerzos, sacrificios y luchas no terminen siempre beneficiando a las grandes cooperativas y acopiadores, los que menos ponen el cuero en la lucha y siempre se olvidan después de que consiguen algunas medidas, que los beneficien a ellos, de seguir apoyando por las reivindicaciones de los más chicos. Solamente así si se puede golpear juntos en determinados momentos.