Después de tres días de paro con piquetes en 10 sucursales de Comodoro, Rada Tilly, Sarmiento, Caleta Olivia, Truncado y Las Heras, los más de 2.000 empleados de comercio, encabezados por sus delegados, se cansaron de las negativas y amenazas de los Braun, que con su soberbia y prepotencia histórica negaban un digno aumento salarial, y solo ofrecían una burla de $200 por única vez.
Después de tres días de paro con piquetes en 10 sucursales de Comodoro, Rada Tilly, Sarmiento, Caleta Olivia, Truncado y Las Heras, los más de 2.000 empleados de comercio, encabezados por sus delegados, se cansaron de las negativas y amenazas de los Braun, que con su soberbia y prepotencia histórica negaban un digno aumento salarial, y solo ofrecían una burla de $200 por única vez.
Entonces -al igual que años atrás- el lunes 20 de diciembre se inició el paro total, con piquetes en las puertas de cada sucursal. Paraban los días de mayores ventas del año, donde la sucursal más grande factura más de un millón de pesos por día. Las principales sucursales, la 21 del barrio 13 de diciembre y la del centro, en Comodoro concentraban gran cantidad de compañeras, muchas de ellas nuevas, que venciendo los temores se plegaron a los paros y a las masivas movilizaciones con corte de la ruta 3 en el centro que convocaron la solidaridad de muchas organizaciones sociales, gremiales y políticas, entre ellas ATE, Atech, CCC, CEPA, Cen. Est. Humanidades.
La respuesta de los sucesores de los saqueadores y asesinos de las huelgas del 21 y la Patagonia Rebelde, los Braun, no se hizo esperar. Llamó “grupito de subversivos extremistas” a la gran masa de mercantiles que con firmeza pararon y salieron a la calle, con total impunidad y el silencio cómplice de Martín Buzzi, intendente de Comodoro y candidato a gobernador por el dasnevismo.
Tratando de aislar y derrotar la lucha, a las bravuconadas de Federico Braun desde Buenos Aires, le siguió el silencio cómplice de Canal 9, y algunos otros medios, “adornados con la propaganda de la empresa”. Se prepara una movilización a las puertas del canal 9 en repudio a su silencio.
Al tercer día de paro, y con dos grandes movilizaciones, en la tarde del jueves 23 empezaron las negociaciones en la Subsecretaría de Trabajo. La mayoría de las asambleas quería seguir la lucha hasta conseguir los 1.000 pesos de reclamo inicial de aumento, aunque se aceptaban cifras menores, dado el cansancio y las presiones que habían. Finalmente el Centro Empleados de Comercio firmó por 2 pagos de 462 pesos en los meses de enero y febrero, la prohibición de cualquier despido por el paro, no descuento de los días de paro y nueva fecha de negociaciones salariales en marzo.
Este triunfo de los mercantiles de La Anónima crea mejores condiciones para fortalecer la organización del Cuerpo de Delegados, imponiendo la elección de mayor cantidad de delegados en todos los sectores de trabajo, y en varias su- cursales que no tienen, para garantizar la continuidad de la lucha y enfrentar las represalias de la empresa, acostumbrada a burlarse de los acuerdos firmados. n