Tras nueve días de tomar el Rectorado de la Universidad Nacional de Jujuy, con aprietes de la policía incluidos, la unidad de los estudiantes de las distintas facultades conquistó la apertura de un Comedor Universitario Centralizado, cerca de las facultades y a precio económico.
Tras nueve días de tomar el Rectorado de la Universidad Nacional de Jujuy, con aprietes de la policía incluidos, la unidad de los estudiantes de las distintas facultades conquistó la apertura de un Comedor Universitario Centralizado, cerca de las facultades y a precio económico.
El acuerdo del rector incluía, entre sus puntos más importantes: la apertura del Comedor centralizado en febrero, la promesa de gestionar fondos para duplicar el actual presupuesto destinado al comedor, poner el comedor en manos de una comisión bajo control estudiantil, no llevar adelante ningún tipo de represalias contra los estudiantes que participaron de la toma y abrir una mesa de diálogo a fin de poder plantear otras demandas el año próximo, como ser la necesidad de un jardín maternal para los hijos e hijas de los estudiantes de la UNJu.
Durante nueve días de toma, hicimos más por los estudiantes que lo que el rector Arnau en ocho años, utilizando el predio del Rectorado en beneficio de los compañeros: clases de apoyo, deportes, jornadas culturales, radios abiertas, etc. cientos de chicos conocieron y pudieron utilizar, por primera vez, las instalaciones del predio del Rectorado.
En la asamblea del jueves 5, con el 60,1% de los votos de los presentes, se resolvió levantar la toma y presentar el acuerdo en conferencia de prensa, donde los estudiantes pudimos dejar en claro ante los medios todos nuestros reclamos y posiciones.
La toma se levantó luego de una asamblea muy discutida donde el trotskismo, que ganó a un sector importante del activo para sus posiciones, proponía “continuar con la toma hasta conquistar todas nuestras reivindicaciones”. Desde la CEPA propusimos aceptar las medidas que le arrancamos al rector con la toma y continuar con la lucha en las calles para asegurar lo que nos falta.
Poniendo el foco en el beneficio de la mayoría de los estudiantes, decidimos cerrar una etapa, recoger lo conquistado, y seguir avanzando para asegurar que se cumpla lo prometido, a la vez que profundizamos los demás reclamos.
La agrupación docente Resistencia, de la Facultad de Humanidades, emitió un comunicado donde afirmaba que “Sólo queda agradecer la valentía, tanto para iniciar la medida como para saber concluirla posibilitando balance de triunfo. Agradecer la lección de solidaridad, de respeto y de claridad política que les posibilitó no ser instrumentos del poder, pero, a su vez lograr que ese poder se vea obligado a dialogar y a claudicar. Han dado un gran paso, quedan muchos para dar”.
Convencidos de que la felicidad es la lucha, los estudiantes jujeños hoy festejamos este triunfo parcial, mientras profundizamos nuestro trabajo por conquistar una Universidad verdaderamente autónoma, científica, democrática y al servicio del pueblo.