La jornada nacional de paro de los camioneros y el paro del ATE, se transformó en un día negro para la política del gobierno de Cristina, de ajuste y de descarga de la crisis mundial sobre los trabajadores y el pueblo. Decenas de miles de trabajadores se movilizaron a Plaza de Mayo, convocados por Camioneros y la CGT moyanista, con la adhesión de la CGT Azul y Blanca, la CCC, Barrios de pie y toda la izquierda. También estuvo el paro del ATE y Judiciales y masivas movilizaciones en 23 provincias convocadas por ATE, la CTA Micheli y la CCC.
La jornada nacional de paro de los camioneros y el paro del ATE, se transformó en un día negro para la política del gobierno de Cristina, de ajuste y de descarga de la crisis mundial sobre los trabajadores y el pueblo. Decenas de miles de trabajadores se movilizaron a Plaza de Mayo, convocados por Camioneros y la CGT moyanista, con la adhesión de la CGT Azul y Blanca, la CCC, Barrios de pie y toda la izquierda. También estuvo el paro del ATE y Judiciales y masivas movilizaciones en 23 provincias convocadas por ATE, la CTA Micheli y la CCC.
Hemos subido varios escalones en la lucha, si comparamos con el gran paro del 8 de junio convocado por la CTA, la CCC, MST, Barrios de Pie. La clase obrera se puso en el centro de la escena política dándole desarrollo a saltos a la continuidad del verano caliente con un otoño caliente y el comienzo de un invierno con todo, en medio de una enorme pulseada política con Cristina contra los topes en paritarias, por la derogación del impuesto a los salarios, por los salarios familiares para todos los trabajadores, por el 82% móvil, por el aumento de los planes, por más planes, contra la inflación, el aumento de ritmos; una enorme pulseada política contra la política del gobierno y de los jerarcas colaboracionistas que quieren copar la CGT, como quiso Yasky copar la CTA y no pudo. Ahora para disfrazar su política ponen un eje muy caro al 90% de la población, golpe-antigolpe.
Un sector muy importante de la clase obrera dio cauce nacional y una gran ayuda a la gloriosa lucha de los judiciales -de tres meses-, a la firme y ruda lucha de los petroleros de Cerro Dragón, a los pesqueros de Mar del Plata, una gran lucha que tuvo su paro regional del 22.
Dijimos en la Mesa Federal de la CCC en abril, que había que ampliar la unidad con audacia, ver a todos los sectores por abajo, en las regionales, y proponer tres puntos mínimos para que se confluyera un día, aunque tuviéramos dificultades para esa articulación. Ese día se logró esa articulación dificultosa aún; ha sido un gran acierto nuestra posición de ampliar los reagrupamientos, encabezando las luchas en paritarias, contra los topes, y contra la ley antiterrorista y la criminalización en todos los terrenos.
Estuvimos junto al paro de la rama de Combustibles de camioneros, y decidimos confluir con la marcha a Plaza de Mayo, sin dejar cada detalle de la preparación del paro del ATE -decidido un mes antes- y preparar las marchas y movilizaciones en cada lugar del país, peleando para que el paro de la CGT y Moyano se extendiera a cada fábrica, a cada lugar de trabajo y no fuera sólo una movilización de camioneros, que sí garantizaba su paro. El mejor ejemplo fue el debate en el turno mañana y tarde de Kraft, llevado adelante por nuestros compañeros, y que logró la votación casi unánime de paro y movilización a Plaza de Mayo.
¿Por qué se pudo acertar? Porque vamos calibrando el estado de ánimo de las masas obreras, porque votaron por ir por más y les proponen ir por menos, porque la inflación está desatada, porque las suspensiones y los despidos llegaron, porque comienzan los cierres de fábricas y empresas, porque la verdad empieza a mostrarse. Cristina ha vaciado todas las cajas. No cede el impuesto a los trabajadores, no devuelve la plata de las obras sociales. Sale a buscar plata donde consiga, pero para ello tiene que cumplir exigencias. La ley antiterrorista es parte de esas exigencias, y a la vez un instrumento para tratar de parar las luchas.
Cristina busca sacar disfrazadamente el ejército a la calle. Quiere echar a Moyano de la CGT, pero hasta Andrés Rodríguez lo fue a saludar al palco. Los “Gordos” dicen que tiene razón con el impuesto, y Cristina recurre al fantasma del golpe de Estado para neutralizar la oposición. ¿Qué clase de antigolpista es Cristina? ¿O será autogolpista? Recordamos bien las bombas en la escuelas de Alfonsín. Nosotros, los clasistas revolucionarios, sí, hemos, somos y seremos consecuentes contra los golpistas y contra los autogolpistas que preparan sus zarpazos contra la clase obrera y el pueblo, porque luchamos por la revolución. Se vienen horas tormentosas pero tenemos experiencias de donde hemos aprendido.
Moyano hizo muy bien en convocar con ese programa el 27, a confluir en un mismo día con ATE y Judiciales. Claro, tenía sus límites si quería tener el acompañamiento de Barrionuevo; fue dificultosa la articulación, pero algo tan importante no se puede resolver en un paso, se necesitan varios. Así por ejemplo ha sido entre la CCC y la CTA Micheli.
El discurso de Moyano fue opositor y en política abordó muy bien el tema del golpismo, sobre todo cuando levantó la lucha de la CGT Brasil y recordó a Cristina exilada en el sur y juntando plata. Habló de las viviendas, del impuesto, del salario familiar, empezó a abrir los brazos para otros sectores, y golpeó a Cristina desde Perón.
Moyano golpeó a los colaboracionistas y se esforzó por disputar en su discurso desde la política y no desde el sindicalismo puro. La pregunta es, ¿por qué no habló de la inflación?, es un tema trascendente. ¿Allí cedió a las patronales? Frente al apoyo de figuras de la otra derecha, Piumato dijo “cuando se sale a la ruta con el auto se pegan muchos bichos”. Es simpática la ocurrencia, pero no responde bien la pregunta, pues hay “algunos bichos” que van buscando una oposición que empuje la devaluación del dólar, y Moyano ya tiene antecedentes, como su postura en el 200l. Cristina dice oponerse a ajustar por devaluación, apostando a imponer “pautas salariales” y ajustar por inflación, apropiándose de cada vez una mayor parte del salario indirectamente a través del IVA y directamente aplicándoles el impuesto a las Ganancias, pagando menos asignaciones familiares y quedándose con parte del salario diferido reteniendo los fondos de las Obras Sociales.
Las condiciones son buenísimas después del 27; hay que seguir la batalla en paritarias, se viene la de petroleros,y Cerro Dragón va marcando la cancha. Hay una disputa feroz en política sobre el balance del paro del 27, debemos librarla lugar de trabajo por lugar de trabajo, y ganarle políticamente al kirchnerismo, encabezar la lucha y ampliar por abajo la unidad y proponer, buscando el consenso, una nueva medida de lucha con un programa mínimo, pero que vaya discutiendo un programa integral de la clase obrera, que dé respuestas muy contundentes al planteo del golpismo del kirchnerismo. Una lucha política y económica que nos permita recuperar cuerpos de delegados y comisiones internas y avanzar con audacia en los centros de concentración del proletariado industrial y rural, fortaleciendo las agrupaciones, la afiliación al PTP y al PCR, con una propuesta de unidad más amplia.