Un artículo publicado en el diario Página 12 del 2 de agosto del 2020, sirve de excelente ocasión para recordar a Horacio Ciafardini.
En su integridad.
Como se destaca en ese artículo, un intelectual marxista, estudioso, incansable, valiente y contestatario. Y por eso mismo reconocido y admirado por personalidades de todo el mundo en su vida.
Tal vez lo fundamental de sus aportes se encuentre en sus estudios de economía política teórica (lo que Horacio llamaba “mis lucubraciones cuasi puras”), centrados en tres campos: el valor, las crisis y la tasa de ganancia, una trilogía de problemas, decía él, en torno a la cual existían y siguen existiendo grandes controversias, y sobre los que redactó textos fundamentales, algunos publicados como El Valor en la Concurrencia y Sobre las teorías de las Crisis Económicas y otros inéditos.
Y a su vez, como un militante político, abnegado y práctico, desde su afiliación a las filas del PCR en los 70 hasta el último día de su vida.
Partido en el que discutió mucho y al que defendió siempre, como cuando ante un reportaje casi provocativo de la Revista Nueva Presencia (14/09/1984), contestó: “comparto todas las ideas en cuestión y sigo pensando que los planteos del PCR en aquella época fueron enteramente justos, incluso los de hoy”.
La dictadura, los revisionistas, los reaccionarios no lo perdonaron nunca y por eso debió pagar largos años en la cárcel durante 6 años, en los que se lo hostigó y se le impidió hasta la lectura.
Como intelectual fue parte sustancial de la construcción de la línea política del Partido, en lucha abierta contra las teorías revisionistas del capitalismo comercial, del capitalismo dependiente, etc. A través de materiales escritos en las publicaciones del PCR y en una profusa actividad como docente y conferencista.
Su influencia perdura en sus obras, escritas algunas de ellas en idiomas extranjeros, publicadas por sus amigos, la editorial Ágora publicó Crisis, inflación, desindustrialización en la Argentina dependiente (1990), la Revista teórica del PCR Teoría y Política, etc. Una parte sustancial de ellas todavía espera su necesaria publicación.
Su memoria vive en el reconocimiento de sus compañeros y de muchísimos intelectuales de diversas ideologías, materializada en la placa descubierta en la Facultad de Ciencias Económicas de Rosario, durante un justo homenaje realizado a 20 años de su muerte.
No es en absoluto casual que su recuerdo se agigante cuando declinan y mueren inmensa cantidad de teorías revisionistas a la moda, incapaces de dar cuenta de la sociedad y sobre todo incapaces de cambiar la injusta realidad en un sentido revolucionario.
Y el marxismo renace, en una permanente revisión crítica, con los necesarios aportes realizados por intelectuales y sobre todo por las enseñanzas de la lucha de la clase obrera y los pueblos del mundo, verdaderos destinatarios de la labor intelectual y militante de Horacio Ciafardini.
Así como se multiplican estudios y aportes sobre la verdadera historia argentina y particularmente sobre las fuerzas revolucionarias.
Escribe Luis Molinas
