A partir de lo definido por el Comité Central desde marzo para acá una preocupación de la dirección zonal fue mantener el funcionamiento del Partido, que no se dispersara. Esto se logró de manera despareja en la zona, y también estuvo vinculado a las disposiciones que tomaba el gobierno con el aislamiento.
Esto lo fuimos peleando en medio de las consecuencias de la pandemia. En nuestra zona tuvimos más de 1.500 compañeras y compañeros de la CCC contagiados, e incluso algunos fallecidos por Covid-19.
La pelea en estos meses fue para que las células se juntaran, que se lea y se discuta la Hora Política del hoy. Tenemos distintas situaciones. En algunos distritos estamos más concentrados en algunos barrios, en otros más dispersos en distintas localidades del mismo distrito. Esto nos obliga a discutir en concreto cómo se reúnen las células. En un momento nos juntábamos todos los afiliados del lugar. Ahora estamos tratando de que se reúnan las células y por frente.
Afiliamos en distintos lugares. Crecimos en medio de la pandemia en la JCR de la zona habiendo definido en conjunto entre Partido y Juventud la necesidad de crecer entre los jóvenes y desde una célula nueva con camaradas afiliados en 2019, pasamos a crecer en poco tiempo en el barrio, en el movimiento de desocupados y a dirigir el club deportivo.
A partir de la última reunión del Comité Central, discutimos en la dirección de zona un plan de afiliación y de reempadronamiento, que empezamos a abordar en los lugares.
Entiendo que es fundamental que este plan lo tomen las células. Con sus propios objetivos. Para mí esta es la diferencia entre una campaña en serio y una formal. Y que ese plan esté vinculado a las necesidades que tiene el pueblo, a la pelea por la ley de tierra techo y trabajo y al impuesto a las grandes fortunas.
Un desafío nuestro es cómo atamos la olla a la ley de tierra, techo y trabajo. Me parece que tenemos que darle otra vuelta a esto, porque algunos compañeros la ven con distancia. Se preguntan “¿En qué me favorecen estas leyes?”. Es muy bueno que tengamos propuestas como estas, que el Partido tenga propuestas políticas.
Entre las compañeras y compañeros que se incorporan vienen distintos debates. Cambian según las edades. Por ejemplo está en discusión el tema de las ocupaciones.
La gente mayor, con el tema de la tierra, te cuenta que logró comprarse el terreno. Y los jóvenes dicen de los dramas de que ni siquiera trabajando dos y con buenos sueldos, pueden comprar un lote. Lo que vemos todos es que son necesarios planes de viviendas.
En general hay mucha preocupación por la falta de trabajo. Las compañeras y compañeros buscan un trabajo para tener un sueldo digno y encarar sus sueños.
Entonces en las reuniones aparecen estos debates ¿cómo se relaciona este presente de que no hay trabajo con la ley de tierra, techo y trabajo que impulsamos?
Una compañera destacaba que nosotros somos un Partido que permite que se discuta todo, y eso la ponía muy contenta. Varios de los que se incorporan destacan eso, la posibilidad de discutir, que en otros lados no tenés.
Es importante que las células decidan. Por ejemplo, en tal lugar tenemos que ser tantos porque tenemos que dirigir la escuela, el barrio, etc.
Hoy N° 1843 02/12/2020
